La presidenta les reclamó a los empresarios que aumenten la producción en el país, aún a costo de reducir su propia rentabilidad. Y rechazó la hipótesis de que para incrementar inversiones sea imprescindible bajar el consumo.
Fortalecida por su continua recuperación en las encuestas, la presidenta Cristina Fernández volvió a recurrir a uno de los clásicos del kirchnerismo: el estímulo al mercado interno para defender el empleo y promover la actividad económica. Fue ayer al mediodía en la localidad bonaerense de Campana, donde encabezó el lanzamiento del nuevo modelo de la terminal automotriz Honda. Escoltada por los gobernadores Daniel Scioli, anfitrión, y Juan Manuel Urtubey, triunfante en las recientes PASO, la mandataria aprovechó la decisión de la firma japonesa Honda para reclamar a los empresarios que aumenten la inversión en el país con una reducción de la rentabilidad de cada compañía. "Para aumentar la inversión, hay que disminuir un cachito la rentabilidad o traer alguna de la que se llevaron afuera. Es mentira que cuando achicás la demanda mejorás inversión, porque reducir la demanda es achicar o reducir los salarios, no hay otra vuelta", advirtió Cristina en un acto que contó con la presencia de trabajadores afiliados al SMATA y del secretario general del gremio, Roberto Pignanelli.
La presidenta estuvo acompañada por una delegación en la que sobresalían el ministro de Economía, Axel Kicillof, y el secretario general de la Presidencia, Eduardo "Wado" De Pedro. También estuvo la ministra de Industria, Débora Giorgi, responsable oficial de monitorear el funcionamiento de las automotrices. En Campana la esperaban el presidente de Honda Sudamérica, Issao Mizoguchi; el titular de Honda Argentina, Hideki Kamiyama, y el embajador de Japón, Masashi Mizukami. En su mensaje, la jefa de Estado recordó que desde 2003 en adelante aumentaron la producción y el consumo de alimentos. Ese dato permitió que la presidenta se refiriera otra vez al "círculo virtuoso" de la economía en esta etapa, basada en la promoción de una actividad que se retroalimenta a través de la demanda impulsada por salarios con poder de compra. "Comimos durante muchas décadas pescado podrido y no queremos indigestarnos de vuelta", fue la metáfora que utilizó CFK para cuestionar la hipótesis según la cual para incrementar la inversión es imprescindible reducir el consumo.
Cristina también elogió los resultados del plan Ahora 12, cuya implementación ya lleva seis meses. Dijo que se concretaron "más de 7 millones de ventas por más de 13 mil millones de pesos", y que el rubro que más creció, gracias al subsidio estatal al uso de tarjetas y pago en cuotas sin interés, fue el de la indumentaria, con el 55% de las operaciones. El Programa de Fomento al Consumo y la Producción fue ideado y puesto en marcha por Kicillof y su equipo del Palacio de Hacienda. La jefa de Estado también defendió el rol del Estado en la redistribución y el fomento a la inversión, en contraste con la teoría económica del "derrame", que cuestionó.
"Yo, que no soy economista pero gobierno este país desde hace ocho años, y que acompañé a gobernar desde la intendencia a Kirchner, te digo: la única manera de achicar la demanda es reduciendo los salarios nominalmente o reduciendo los salarios por paridad de poder adquisitivo", subrayó. "El que les diga otra cosa, les miente o les quieren enroscar la… no digo esa palabra porque trae mala suerte", afirmó, y dejó incompleta la frase. Sin embargo, luego se animó a contar que en el horóscopo chino es "serpiente de agua".
Ayer se presentó el nuevo modelo global Honda HR-V, auto del tipo SUV (Sport Utility Vehicle, vehículo todoterreno utilitario) que la compañía prevé fabricar en la Argentina hasta llegar a las 15 mil unidades al año: el 70% de esa cifra total se destinará a la exportación (ver aparte). "Este nuevo auto va a tener mucho éxito. Siempre doy éxito a los autos que presento. Lo han tenido todos históricamente y el auto es precioso", comentó Cristina. Como se estila en estos actos, antes de hacer su discurso se comunicó por videoconferencia con Avellaneda, donde se estrenaba la planta de Italbus, que produce carrocerías para micros de corta y larga distancia. Entonces dialogó con el intendente local, Jorge Ferraresi (FPV), trabajadores y empresarios. La actividad en Campana siguió con otra videoconferencia, esta vez a San Miguel de Tucumán por la ampliación de la Planta Piloto de Procesos Industriales Microbiológicos (Proimi). La presidenta también envió un afectuoso mensaje de condolencias para Stella Maris Giroldi, intendenta de Campana, de licencia por el problema de salud de un familiar. «
La presidenta estuvo acompañada por una delegación en la que sobresalían el ministro de Economía, Axel Kicillof, y el secretario general de la Presidencia, Eduardo "Wado" De Pedro. También estuvo la ministra de Industria, Débora Giorgi, responsable oficial de monitorear el funcionamiento de las automotrices. En Campana la esperaban el presidente de Honda Sudamérica, Issao Mizoguchi; el titular de Honda Argentina, Hideki Kamiyama, y el embajador de Japón, Masashi Mizukami. En su mensaje, la jefa de Estado recordó que desde 2003 en adelante aumentaron la producción y el consumo de alimentos. Ese dato permitió que la presidenta se refiriera otra vez al "círculo virtuoso" de la economía en esta etapa, basada en la promoción de una actividad que se retroalimenta a través de la demanda impulsada por salarios con poder de compra. "Comimos durante muchas décadas pescado podrido y no queremos indigestarnos de vuelta", fue la metáfora que utilizó CFK para cuestionar la hipótesis según la cual para incrementar la inversión es imprescindible reducir el consumo.
Cristina también elogió los resultados del plan Ahora 12, cuya implementación ya lleva seis meses. Dijo que se concretaron "más de 7 millones de ventas por más de 13 mil millones de pesos", y que el rubro que más creció, gracias al subsidio estatal al uso de tarjetas y pago en cuotas sin interés, fue el de la indumentaria, con el 55% de las operaciones. El Programa de Fomento al Consumo y la Producción fue ideado y puesto en marcha por Kicillof y su equipo del Palacio de Hacienda. La jefa de Estado también defendió el rol del Estado en la redistribución y el fomento a la inversión, en contraste con la teoría económica del "derrame", que cuestionó.
"Yo, que no soy economista pero gobierno este país desde hace ocho años, y que acompañé a gobernar desde la intendencia a Kirchner, te digo: la única manera de achicar la demanda es reduciendo los salarios nominalmente o reduciendo los salarios por paridad de poder adquisitivo", subrayó. "El que les diga otra cosa, les miente o les quieren enroscar la… no digo esa palabra porque trae mala suerte", afirmó, y dejó incompleta la frase. Sin embargo, luego se animó a contar que en el horóscopo chino es "serpiente de agua".
Ayer se presentó el nuevo modelo global Honda HR-V, auto del tipo SUV (Sport Utility Vehicle, vehículo todoterreno utilitario) que la compañía prevé fabricar en la Argentina hasta llegar a las 15 mil unidades al año: el 70% de esa cifra total se destinará a la exportación (ver aparte). "Este nuevo auto va a tener mucho éxito. Siempre doy éxito a los autos que presento. Lo han tenido todos históricamente y el auto es precioso", comentó Cristina. Como se estila en estos actos, antes de hacer su discurso se comunicó por videoconferencia con Avellaneda, donde se estrenaba la planta de Italbus, que produce carrocerías para micros de corta y larga distancia. Entonces dialogó con el intendente local, Jorge Ferraresi (FPV), trabajadores y empresarios. La actividad en Campana siguió con otra videoconferencia, esta vez a San Miguel de Tucumán por la ampliación de la Planta Piloto de Procesos Industriales Microbiológicos (Proimi). La presidenta también envió un afectuoso mensaje de condolencias para Stella Maris Giroldi, intendenta de Campana, de licencia por el problema de salud de un familiar. «
Audiencia con la comunidad armenia
La presidenta Cristina Fernández recibió ayer en la Residencia de Olivos a integrantes de la Comunidad Armenia en la Argentina, al cumplirse este mes 100 años del genocido perpetrado contra el pueblo armenio a manos del Imperio Otomano, con un saldo estimado de víctimas fatales de entre un millón y medio y 2 millones de personas.
Fueron recibidos por la mandataria el arzobispo Kissag Mouradian, primado de la Iglesia Apostólica Armenia para la República Argentina; Alberto Djeredjiam presidente del centro Armenio; Bartolomé Ketchian, presidente de la Fundación Consejo Nacional Armenio, según se informó oficialmente, al término del encuentro.
También asistieron el médico Daniel Stamboulian, titular de la Fundación Centros de Estudios Infectólógicos y presidente de Fighting Infectios Diseases in Emergin Countries; el empresario Eduardo Eurnekian, presidente de la Corporación América; León Arslanian, ex ministro de Justicia de la Nación y ex titular de la cartera de Justicia y Seguridad de la Provincia de Buenos Aires.
Fueron recibidos por la mandataria el arzobispo Kissag Mouradian, primado de la Iglesia Apostólica Armenia para la República Argentina; Alberto Djeredjiam presidente del centro Armenio; Bartolomé Ketchian, presidente de la Fundación Consejo Nacional Armenio, según se informó oficialmente, al término del encuentro.
También asistieron el médico Daniel Stamboulian, titular de la Fundación Centros de Estudios Infectólógicos y presidente de Fighting Infectios Diseases in Emergin Countries; el empresario Eduardo Eurnekian, presidente de la Corporación América; León Arslanian, ex ministro de Justicia de la Nación y ex titular de la cartera de Justicia y Seguridad de la Provincia de Buenos Aires.
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