En la tapa de su último álbum, Fito Páez optó por no mostrar un retrato de él mismo o de algún recurso visual que remita a su presente: prefirió la imagen de otro artista. “Ahí hay algo histórico, donde los dos nos fundimos en un álbum, porque en la foto central está su cuerpo, pero va con mi nombre”, subraya el músico ante Rock and roll revolution, trabajo lanzado en septiembre y pensado como un tributo a Charly García, el mismo que aparece en la carátula casi esquelético, en cuclillas y en medio de un caótico show de 1996.
No es la mejor postal del ex Sui Generis, pero sirve para ilustrar una obra con composiciones escritas por el propio Páez, pero repletas de reverencias y alusiones al músico cuya banda de acompañamiento integró en los 80 (“Si te dejo en una habitación/ frente a frente con Charly García/te orinarías y saldrías corriendo/ te daría miedo/ no lo bancarías”, canta en el track que bautiza la producción).
“Poner ese cuerpo de Charly en un estado de tanta fragilidad es recordar quienes somos y lo mucho que necesitamos de él. La fuerza que él ha hecho para traer todos sus valores lo ha desgastado demasiado, porque es mucho lo que ha hecho ese hombre. Estoy en una etapa donde me reconozco mucho en él”, describe, al teléfono desde Córdoba. Pero, en las próximas semanas, el rosarino volverá a ser el único protagonista de su obra y de la manera más elocuente: con un recital donde se mueve solo en el escenario. Solo piano se llama el espectáculo con el que se presentará el 14 y 15 de febrero en el Casino de Viña (entradas en Puntoticket).
¿Qué busca con estos shows más sencillos?
Es una situación que, cada vez que aparece, me libera de la presión de estar con el grupo. Todas las noches puedo hacer algo diferente y eso es siempre muy relajado. Es cierto que en los recitales con banda hay una pulsión más eléctrica, más alta, y acá todo es mucho más interior, los silencios pesan más. Pero soy pisciano, así que puedo manejar bien las dos cosas.
¿Por qué sintió que, a sus 51 años, era el momento de un homenaje a García?
No me gusta la palabra homenaje, pero lo que pasó es que yo estaba en un momento personal muy perdido y tuve la sensación que él me dictó las canciones, a través de las cosas que sembró en mi tálamo emocional. Sentí que me decía: “Hey, tienes que decir tu verdad, no tienes que ser hipócrita. Si quema, quema. Si arde, arde. Y si no te gusta algo, tienes que nombrarlo”. Hoy hay una suerte de desaparición del rock argentino, entonces Charly nos recuerda la lucidez y la inteligencia.
Con la muerte de Spinetta y Cerati, ¿es este disco una declaración de sobrevivientes del rock argentino?
Puede ser, eso es una teoría tuya. No fue intencional. Ambas muertes fueron dramáticas, pero de alguna manera estos temas también son una apuesta por la vida.
¿Por qué cree que el rock de su país ha perdido tanta fuerza continental?
Podemos pensar varias cosas. Primero, en la Argentina, que es una máquina parricida. El rock sirvió simplemente cuando era necesario: en la guerra, en el nacimiento del kirchnerismo, porque era un motor en donde se apostaba por el futuro, por estéticas revoltosas. Ahora hay una desaparición tácita, de la que nadie tomó la decisión, pero hay poca gente profesionalizando el tema. Además, antes se necesitaba un héroe que dijera lo que nadie se atrevía; hoy esa figura desapareció y está la red, donde todos hablan por su lado.
¿Tiene alguna reflexión acerca de lo sucedido con la muerte del fiscal Nisman?
Está que quema el tema. Lo único que puedo decir es que hay que garantizarle a la justicia una actuación limpia y clara, y eso depende de los hombres que estén exclusivamente dentro de la vida judicial. Cristina (Fernández) ha tomado una decisión muy acertada ahora y ojalá eso llegue a buen puerto; que este nuevo sistema pueda recrear las redes de inteligencia que necesita cualquier país, de un modo limpio y con control político.
¿Le parece que ella lo ha hecho bien en este tema?
Fue muy rápido todo y yo no estoy en el sillón de Rivadavía. Se habla mucho, hay una necesidad por hablar y expresarse, pero lo más importante es hacer foco en la ley. Lo que se hace fuera de la justicia es charlatanería, entonces hay que ser respetuosos.
Pero, ¿qué le parece que la propia gente se haya mostrado crítica hacia el gobierno?
Me parece bien, pero ya está. Ya hablamos del tema, no sigamos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario