Por Sebastian Abrevaya
Ni con Sergio Massa ni con Mauricio Macri. Eso dijeron ayer todos los partidos que integran el Frente Amplio Unen de la provincia de Buenos Aires. Reunidos en un plenario en Burzaco, toda la cúpula bonaerense del FA-Unen envió un mensaje claro a dirigentes como Gerardo Morales, quien anunció un acuerdo provincial con el líder del Frente Renovador, y como Oscar Aguad, que pregona de viva voz una alianza nacional con el PRO. “Dirigentes que hace muy poco tiempo formaron parte de altas responsabilidades del oficialismo y convalidaron todas sus políticas, así como los que pretenden para la Argentina las mismas concepciones que imperaron en nuestro país en la década del ’90, NO (mayúsculas en el original) pueden ser parte del proyecto político al que estamos convocando”, afirmaron en el documento conjunto, donde también le reclaman a la conducción nacional del frente que defina su posición al respecto.
Ricardo Alfonsín (UCR), Gerardo Milman (GEN), Ricardo Cuccovillo (socialismo), Mario Cafiero (Proyecto Sur), Horacio Piemonte (Coalición Cívica), Eduardo Romanin (PSA), Mariano Alvarez (Movimiento Social por la República), entre otros dirigentes y fuerzas provinciales se reunieron ayer en una sede de ATE en el partido de Almirante Brown. La convocatoria se hizo en uno de los encuentros que todos los martes realiza el FA-Unen bonaerense. Se invitó a 10 representantes por cada fuerza con el objetivo de analizar la realidad provincial y debatir la política de alianzas. La definición fue un abierto rechazo a la posibilidad de juntarse tanto con el Frente Renovador como con el PRO para la elección de gobernador y la de presidente.
“Fue más que una declaración política. Fue una toma de posición y desde la provincia se le está planteando a la conducción nacional que tome esta actitud. No estamos de acuerdo con una alianza de esta naturaleza. Teníamos que hacer sentir nuestra posición porque somos la provincia más grande de la argentina”, aseguró a Página/12 el diputado alfonsinista, Miguel Bazze. “Si Jujuy, que representa el 0,9 del padrón del país, puede fijar su política de alianzas, nosotros desde la provincia de Buenos Aires también tenemos derecho a pronunciarnos”, completó Milman, titular del GEN bonaerense. La mención a Jujuy tiene que ver con la polémica provocada por la foto del jefe del bloque de senadores radicales, Gerardo Morales y el líder del Frente Renovador, Sergio Massa.
En el cónclave de ayer quisieron dejar en claro su posición, remarcando que se trata del distrito más poblado del país y que los eventuales acuerdos locales que pueda alcanzar el massismo se dan en provincias con bajo peso electoral. “La única provincia grande es Córdoba, y el debate ahí es sobre un acuerdo con Macri”, relató uno de los integrantes de la reunión.
Si bien la mayoría de los presentes ya había marcado su posición públicamente, la sorpresa de ayer vino por el lado de la Coalición Cívica y el Movimiento Social por la República, que ambos responden a Elisa Carrió. Si bien la chaqueña es una de las más enfáticas impulsoras del acuerdo con Macri a nivel nacional, sus dos fuerzas bonaerenses firmaron ayer el documento. Durante el debate, hubo ciertos reparos de estas fuerzas, que tomaron un poco de distancia de la posición del resto de los partidos. La CC bonaerense está ahora intervenida, ya que su ex presidente, Walter Martello, se pasó junto a otros referentes locales a las filas del massismo. El Movimiento Social por la República, en cambio está liderado por Héctor “Toty” Flores, un incondicional de Carrió.
“No compramos este discurso de que tenemos que juntarnos todos porque estamos al borde de un precipicio, o de una dictadura. Somos críticos del gobierno y sabemos que hay problemas pero no vamos a aliarnos con quienes pensamos diferente”, aseguró Bazze. En la misma línea, Milman agregó que el de Argentina no es un caso análogo al de la salida de la dictadura pinochetista chilena, como planteron algunos dirigentes. “Es un modelo muy autoritario, un régimen populista, pero nosotros no consideramos que estábamos frente a una dictadura”, concluyó Milman, uno de los dirigentes más cercanos a Margarita Stolbizer.
“A nivel nacional creemos que es imperioso saldar discusiones que no contribuyen al fortalecimiento del espacio desdibujando su identidad”, sostiene el texto firmado. Si bien los bonaerenses tienen claro que no pueden intervenir en la autonomía de otros distritos para definir sus alianzas, empujar una definición a nivel nacional podría poner límites a provincias como La Rioja, Tucumán, Santa Cruz, Formosa o Catamarca, en donde avanzan los acuerdos por fuera del FA-Unen. Habrá que ver si las conducciones nacionales recogen el guante o continúan dejando correr libremente a sus jefes territoriales.
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