domingo, 2 de junio de 2013
Precedentes Por Mario Wainfeld
Es remanido proclamar que en la Argentina no existen partidos políticos. Se comete un error, palpable si se tabula en serio el despliegue (medido en gobernaciones, intendencias o cargos legislativos) del Frente para la Victoria (FpV). O, si se quiere, de las distintas ramas del peronismo.
También es una subestimación del relativo potencial del radicalismo.
El FpV y la UCR tienen representación en los 24 distritos, un capital que vale a la hora de juntar fiscales, militantes y hasta votos.
- - -
Consultores afines a la oposición auguran derrotas del FpV en cuatro de las cinco provincias más grandes: Ciudad Autónoma, Córdoba, Mendoza y Santa Fe. Los oficialistas no dan el brazo a torcer pero, íntimamente, coinciden en la tendencia del diagnóstico para tres. La excepción es Mendoza, donde el kirchnerismo se lee ganador.
Como fuera, si en bancas se mira, cualquier panorama luce menos agobiante para el FpV. En 2009 consiguió un diputado en la CABA, una en Córdoba, uno en Mendoza y dos en Santa Fe. Cinco en total, muy poquitos. Considerando que esos distritos renuevan ahora 36 bancas, parece más que factible una mejora de la cosecha oficialista.
- - -
Se dice también que el bipartidismo ha muerto, pero datos de los comicios de 2009, suministrados gentilmente por el politólogo Andrés Malamud, relativizan el tremendismo del aserto.
Se lo cita, casi textual: “Catorce provincias repartieron sus bancas entre dos partidos. Cuatro provincias, entre tres partidos: Santa Fe, Mendoza, Salta y Corrientes. Y tres provincias repartieron entre cuatro: Buenos Aires, Córdoba y Capital”.
“Decir que 14 provincias son bipartidistas –matiza Malamud– es jugar en el límite, porque en algunos casos el tercero quedó afuera por poco. Pero por ahí anda la cosa y dado que son distritos chicos (eligen hasta 5 diputados, generalmente sólo 2 o 3), el escenario posiblemente no va a variar.”
- - -
En 2009, en la peor elección de su gestión, el FpV consiguió diputados en 22 de los 24 distritos. Las excepciones fueron San Luis y Neuquén, aunque los legisladores del Movimiento Popular Neuquino se comportaron como aliados del oficialismo, en general.
La UCR, en variadas alianzas, consiguió diputados en 17 provincias. Ahora los arriesga, le será muy peliagudo mantenerlos.
02/06/13 Página|12
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario