El Gobierno salió ayer al cruce de los estudios privados que dan cuenta de un incremento en el nivel de pobreza e indigencia en el país, días después de que el Indec decidiera suspender la publicación de esos indicadores correspondientes al segundo semestre de 2013. La voz cantante la llevó el ministro de Economía, Axel Kicillof, quien remarcó que “si se duplicó el PBI” y “se crearon seis millones” de puestos de trabajo, “nadie puede creer que no hayan bajado los niveles de pobreza”. A sus dichos se sumaron los de sus pares de Planificación Federal, Defensa e Interior y Transporte: Julio De Vido afirmó que la divulgación de esos informes corresponden a una “operación mediática”, mientras que Agustín Rossi criticó a quienes “pretenden desconocer cómo ha cambiado la situación social” desde 2003 y Florencio Randazzo declaró que este Gobierno es el que “más inclusión generó en los últimos 50 años”.
“¿Cómo es posible que haya la misma pobreza si se crearon casi seis millones de puestos de trabajo y junto con ello se desplegaron las políticas sociales de mayor cobertura en toda la historia argentina?”, reflexionó Kicillof. Respondió así a estudios como el publicado el viernes por el Observatorio de la Deuda Social de la Universidad Católica Argentina (UCA). Ese informe sostiene que la pobreza en el país avanzó hasta el 27,5 por ciento en el último trimestre de 2013.
El ministro de Economía recordó los avances en materia de políticas sociales y mencionó, entre otras cosas, la firma de 1600 convenios colectivos de trabajo, la multiplicación de redes de agua potable y la construcción de viviendas sociales en todo el país desde el 2003 en adelante. “Nadie puede creer que el país de hoy esté como entonces, cuando las jubilaciones aumentaron casi un 1800 por ciento y los salarios más de 1700 por ciento, y ningún índice de aumento de precios da cerca de esos porcentajes”, enfatizó.
Para Kicillof, hay una “clara intencionalidad política” de los sectores que “quieren negar los logros alcanzados respecto de la baja de pobreza, desempleo y desigualdad”. “Quienes hacen estas afirmaciones son los que deberían explicar cómo llegan a semejantes conclusiones”, reclamó el ministro.
De Vido también salió al cruce de los estudios privados que aseguran que se registró un incremento en el nivel de pobreza y los calificó como “operaciones mediáticas promovidas por medios hegemónicos”. “Falsean la realidad para poner en duda los incuestionables logros del gobierno nacional”. El ministro de Planificación agregó: “Pretenden volver al modelo neoliberal, donde el Estado se reduzca a su mínima expresión”.
Rossi defendió también las políticas del Gobierno que, aseguró, “permitieron que pasemos del 60 por ciento al 90 por ciento de adultos mayores incluidos en el sistema previsional”. Asimismo, criticó a quienes “pretenden desconocer cómo ha cambiado la situación social de los argentinos desde 2003 en adelante”.
Randazzo, por su parte, destacó la “inclusión” que se registró en la última década y agregó que “los medios dominantes no critican por lo que falta” sino porque “quieren cambiar lo que se hizo bien”.
En tanto, la oposición se hizo eco del estudio de la UCA y lo aprovechó para cuestionar nuevamente al Gobierno. El diputado nacional y líder del Frente Renovador, Sergio Massa, criticó la “negación” de los índices de la inflación y sostuvo que “la manipulación del Indec y la actuación de (Guillermo) Moreno son cuestiones que primero se niegan y en el futuro se pagan”, en referencia a la intervención que el ex secretario de Comercio llevó adelante en la entidad de estadísticas oficiales. “La inflación, además de deteriorar el bolsillo a jubilados, trabajadores, a comerciantes y pequeños y medianos comerciantes, es una fábrica de pobreza enorme”, señaló el ex intendente de Tigre.
Desde la CGT opositora, que encabeza el camionero Hugo Moyano, también cruzaron al Gobierno por el tema de la pobreza. Al respecto, el Observatorio de Datos Económicos y Sociales de esa central sindical aseguró que este indicador, en el último semestre de 2013, ascendió hasta el 30,1 por ciento, lo que representaría unos 12 millones de pobres en territorio argentino.
La Iglesia también dijo lo suyo. Lo hizo a través del presidente de la Comisión Episcopal para la Pastoral Social, Jorge Lozano, quien indicó ayer que “hay sectores que crecieron mucho económicamente” pero que ese avance “se concentró en pocos bolsillos” y que sólo “se distribuyó una parte”. “El camino para superar la pobreza es el trabajo debidamente registrado y con un salario justo”, aseveró el religioso, y señaló que herramientas como los planes sociales son “para atender a las necesidades más urgentes”.}
página 12
No hay comentarios:
Publicar un comentario