El Sur porteño, con fuerte consumo y sin locales libres
13/07/11 Superan al promedio de 94% de negocios alquilados en Capital. Dicen que influyen el crecimiento de población en la zona y la mejora de ingresos. Pero hay quejas por la falta de servicios públicos y privados. Más movimiento en Villa Lugano y Villa Riachuelo
PorEinat Rozenwasser TODO LLENO, LOS LOCALES DE LA CALLE CHILAVERT
Clarín.com UNA DE LAS CALLES DEL SUR QUE ESTAN A PLENO.
De cabo a rabo. Los casi 1.100 locales que conforman los centros comerciales de Villa Lugano y Villa Riachuelo, dos de los barrios más postergados , tienen el 100% de ocupación . Con estas cifras, superan el 94% que marca el promedio de la Ciudad, según datos del último relevamiento oficial. En este proceso influye el crecimiento de población para la zona (con Villa Soldati conforman la Comuna 8), que los datos preliminares del Censo 2010 ubican en el orden del 22,3%. Además de la mejora en la capacidad de consumo que se traduce en bienes, porque tampoco permite volcarse hacia inversiones de mayor envergadura.
En esa línea avanza el análisis del último Informe del Mercado Inmobiliario de L.J.Ramos. “En 2002, después de la crisis, empezó el crecimiento de la ocupación que tuvo una caída en 2008 y volvió a levantar este año”, explica Pablo Vivot, director de la División Retail de la empresa. Y sigue: “Está subiendo el poder adquisitivo de los grupos que están en la base de la clase media y eso hace que focos que antes eran secundarios para el circuito comercial hoy tengan el mayor factor de ocupación”.
Más allá del crecimiento parejo, cada uno de estos centros comerciales mantiene su esencia . El de la avenida Riestra (unas ocho cuadras y otras tantas sobre Murguiondo, la trasversal más poblada), claramente relacionado con el movimiento de la estación Villa Lugano del ferrocarril Belgrano Sur, el punto de transferencia para los que llegan en colectivo desde el centro de la Ciudad y hacen el trasbordo para La Matanza. Y el de la calle Chilavert, entre la colectora de la General Paz y Lisandro de la Torre, que contiene la demanda del barrio pero también recibe a los que viven del otro lado de la autopista. En cualquiera de las esquinas tradicionales, la tarde respeta la siesta rigurosa y las cortinas empiezan a levantarse recién a partir de las 16.
“En general son comercios de consumo masivo. En indumentaria, algunos confeccionistas que venden su ropa y prácticamente no hay marcas, como sucede en otros centros comerciales”, describe Arturo Stabile, presidente de Comerciantes, Industriales y Profesionales Asociados de Lugano y Riachuelo. Son locales pequeños , y predominan los que venden indumentaria (en la mayoría de los casos, femenina), calzados, alimentación (especialmente granjas y fiambrerías) y algunos bazares.
Reinaldo Crucitta trabaja desde hace casi 40 años con el mercado inmobiliario de la zona. “En este momento no hay locales en venta ni en alquiler, la gente no se mueve”, confirma. El costo varía en función de la ubicación. En las calles laterales de Villa Riachuelo, un negocio de entre 3x6 y 3x8 metros se alquila entre $ 1.500 y $ 1.800 por mes. Sobre Chilavert trepa hasta los $ 2.500 a $ 3.000, y un poco más en las cercanías del cruce con Guaminí.
Cae la tarde y por la calle se ve movimiento, aunque muchos vecinos digan que la zona perdió el esplendor que supo tener en las épocas en las que tenían “hasta dos cines funcionando”. “Acá compra gente del barrio, no tenemos turismo ni gente de afuera. Es clase trabajadora, empleados estatales, municipales: si está afectada la industria o el mercado interno, acá golpea mucho”, describe Stabile. En ese registro, los comerciantes hablan del pico de ventas que se produce a principio de mes y en el cambio de quincena. Y también con las fechas de pago de los diferentes planes sociales, un eje en el que influye la cercanía con la Villa 20. “El comercio de proximidad fue el primero en recuperarse después de la crisis. Y sigue manteniendo el crédito a sola firma, especialmente en indumentaria deportiva”, analiza Stabile.
El cambio también se nota en el rubro viviendas, con más edificios en construcción (torres de pocos pisos con departamentos de dos o tres ambientes) y propietarios que se animan a refaccionar o a ampliar sus casas. Y en el parque automotor: los vecinos coinciden en que es cada vez más difícil estacionar en los alrededores de ambos centros comerciales durante el horario de actividad comercial.
Según los datos preliminares del Censo 2010, la Comuna 8 pasó de tener 151.078 a 184.703 habitantes. El crecimiento se contrapone con la ausencia de centros de atención para servicios públicos y privados. “Cualquier trámite que te toque hacer tenés que ir hasta Flores porque no tenemos sucursales de nada”, dice Stabile. Hay muy pocos bancos y sacar plata de un cajero automático es casi una odisea. También hay quejas por la inseguridad (que hace que los locales no permanezcan abiertos más allá de las 20) y por las dificultades que presenta el mantenimiento urbano. “Hay que estar detrás de todo y es más lento”, apunta.
Comprende qué es el modelo nacional?.
Defiende la Cultura del trabajo?.
Y no votó por eso globos?.
Y el Norte rico, acostumbrado a serlo, siguió con su pachorra cotidiana y votó lo que tenía a mano, amarillo, amarillento, insulso, insípido, inodoro?.-
Grecia al borde del default, Italia y EE.UU. con su neoliberalismo a cuestas apuestan a mas recortes y ajustes.
En el sur porteño apostamos a la Cultura del Trabajo.
Así la esperanza florece, y las ideas permanecen y la política como construcción colectiva
avanza y el 31 o agosto u octubre no son patrimonio de la nueva derecha porteña.
Siguen siendo peronistas, frentistas, nacionales, populares.
A militar que todavía nos quedan mas corazones por conquistar.
GB