El vicepresidente de Bolivia, Álvaro García Linera, habló en el Foro por la Emancipación y la Igualdad que organiza el ministerio de Cultura de la Nación. "La democracia de la calle garantiza un nuevo tipo de gobernabilidad", dijo.
El vicepresidente de Bolivia, Alvaro García Linera, afirmó anoche que "hay gobernabilidad en América Latina si simultáneamente se combina fuerza electoral con fuerza en la calle" al reivindicar la experiencia posneoliberal de los últimos 15 años, pero subrayó que la integración regional no perdurará si no se pasa "del encuentro político y del encuentro cultural, al encuentro económico".
En el marco del Foro por la Emancipación y la Igualdad que organiza el ministerio de Cultura de la Nación en el Teatro Cervantes, García Linera insistió en la idea de que "la democracia de la calle garantiza un nuevo tipo de gobernabilidad" e instó a mostrar que "los regímenes progresistas y revolucionarios no solamente somos más democráticos, sino también económicamente más creativos y más igualitarios y más redistributivos de la riqueza".
"¿Y saben por qué? Porque no queremos que este despertar de las izquierdas latinoamericanas sea un corto verano", remató ante un auditorio colmado que lo ovacionó.
Acompañado en el panel por el dirigente español de Podemos Iñigo Errejón, el periodista Ignacio Ramonet y el secretario de Coordinación de Pensamiento Nacional Ricardo Forster, el catedrático boliviano recalcó: "No queremos, compañero Iñigo, ser parte de una novela de un corto verano. Queremos que dure mucho. Queremos que dure décadas. Queremos que dure para siempre".
En la segunda mesa del encuentro, titulada "América Latina y Europa en espejo", que fue moderada por el filósofo Diego Tatián, García Linera señaló que "no se trata de imitar moldes" porque "ningún pueblo es parecido al otro, no hay una fórmula que todos debamos imitar. Lo que hay son situaciones que enriquecen la experiencia del otro".
"Lo nuevo de América Latina es que la democracia no se puede reducir únicamente al voto", dijo, y detalló como formas de "enriquecimiento de lo democrático" a "la democracia callejera que ejercemos en las marchas, en las avenidas, en los sindicatos, en las asambleas, y en las comunidades".
En ese sentido, calificó a "muchos países del mundo que tienen sistemas electorales" como "democracias fósiles".
El vicepresidente de Bolivia, Alvaro García Linera, afirmó anoche que "hay gobernabilidad en América Latina si simultáneamente se combina fuerza electoral con fuerza en la calle" al reivindicar la experiencia posneoliberal de los últimos 15 años, pero subrayó que la integración regional no perdurará si no se pasa "del encuentro político y del encuentro cultural, al encuentro económico".
En el marco del Foro por la Emancipación y la Igualdad que organiza el ministerio de Cultura de la Nación en el Teatro Cervantes, García Linera insistió en la idea de que "la democracia de la calle garantiza un nuevo tipo de gobernabilidad" e instó a mostrar que "los regímenes progresistas y revolucionarios no solamente somos más democráticos, sino también económicamente más creativos y más igualitarios y más redistributivos de la riqueza".
"¿Y saben por qué? Porque no queremos que este despertar de las izquierdas latinoamericanas sea un corto verano", remató ante un auditorio colmado que lo ovacionó.
Acompañado en el panel por el dirigente español de Podemos Iñigo Errejón, el periodista Ignacio Ramonet y el secretario de Coordinación de Pensamiento Nacional Ricardo Forster, el catedrático boliviano recalcó: "No queremos, compañero Iñigo, ser parte de una novela de un corto verano. Queremos que dure mucho. Queremos que dure décadas. Queremos que dure para siempre".
En la segunda mesa del encuentro, titulada "América Latina y Europa en espejo", que fue moderada por el filósofo Diego Tatián, García Linera señaló que "no se trata de imitar moldes" porque "ningún pueblo es parecido al otro, no hay una fórmula que todos debamos imitar. Lo que hay son situaciones que enriquecen la experiencia del otro".
"Lo nuevo de América Latina es que la democracia no se puede reducir únicamente al voto", dijo, y detalló como formas de "enriquecimiento de lo democrático" a "la democracia callejera que ejercemos en las marchas, en las avenidas, en los sindicatos, en las asambleas, y en las comunidades".
En ese sentido, calificó a "muchos países del mundo que tienen sistemas electorales" como "democracias fósiles".
No hay comentarios:
Publicar un comentario