domingo, 16 de diciembre de 2012

AMERICAN WAY OF LIFE.

A mediados de la década del '60 y comienzos de los '70, los enlatados televisivos a los niños y adolescentes de aquella época nos traían héroes apenas acompañados por un segundón o un puñado de segundones.
El llanero solitario y su mexicano, Batman y Robin, Linterna Verde y Kato, El Zorro y su sirviente sordo-mudo, o Combate con el sgto. Sunders y su pelotón, Ataque, y por supuesto los detectives Starsky y Hucht o Kojak.
Perdón, olvidaba entre otras decenas a Los Intocables.
Sin desdeñar a las historietas (comics) de superhéroes, de la DC o Marvel.

Años viendo, leyendo sin saberlo, por supuesto, y como íconos del entretenimiento el American Way of Life.
El solo hombre o la sola mujer (el hombre nuclear, la mujer maravilla, la mujer biónica) salvando millones de vidas atacadas por apaches, mexicanos, bandidos del oeste, alemanes, japoneses o soviéticos ( Rocky y Rambo).
El eje del mal, hoy personificado por árabes que no lo son, antes por pueblos originarios, latinos o europeos que pretendían destruir al American way....
Hollywood fue y es le paradigma de esta sociedad sola, individualista, sin héores colectivos.
Los superpoderes que la protegen en un individuo (Superman), capaz de destruir extreterrestres o villanos en algunos casos propios pero en general extranjeros.
Ni la India se salva con la película que es un canto al cipayismo, como Gunga Dhin.

Los duelos de la ley del revólver, y el enemigo sordo y mudo que muere por miles, mientras un rasguño apenas roza al muchachito John Wayne de turno que extermina y sonríe como en un jueguito electrónico.

Crecimos colonizados, pero en contextos políticos apropiados para saber diferenciar al verdadero enemigo.
Al Imperio.

Sin embargo él, globalización mediante, y con sus armas tradicionales continúa su saga letal, vendiendo Miami o Papa Noel, Batmanes o pobres ex miembros de las decenas de "compañías" que protegen al mundo, arrepentidos y perseguidos por sus jefes porque a lo mejor cuentan, porque han recuperado la memoria alguna masacre en poblaciones ignotas para ellos, por lo tanto para todos.

Y Obama, llora, y no sabe que en su país el 40 % de sus 314 millones de habitantes portan armas.
Y se masacran como espejo roto de sus andanzas por el planeta.
My Lai es Hiroshima y Nagasaky y los poblados iraquíes, afganos, como antes la CIA en Centroamérica.
Millones de seres humanos dañados colateralmente que pareciera se han vuelto hacia las praderas conquistadas por el remington;
recreando y creando en Newtown, Columbine, (y la próxima estación), a  EE.UU. en la escena del crímen mas grande del mundo.
Demasiado para cualquier policía científica.

Qué mayor inseguridad puede haber que enviar a tu hijo a la escuela pensando que lo van a asesinar adentro?
O a la Universidad, o en el cine, o ....

Miami, la Estatua de la Libertad, N.Y., el Dólar, Santa Claus y sus trineos, la fantasía de un mundo de stars, feliz y hermoso, sus empresas que progresan, su tecnología, su consumismo desenfrenado, son también armas de destrucción masiva que Irak nunca tuvo, pero ellos sí.

Son objetos de consumo consumidos por si mismos, blanco de sus tiros, jueguitos de sí mismos, que exportan su way of life.
El proteccionismo es fundante, soberano, nacional, colectivo.

GB

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