Por Carlos Rodríguez
“Ni un peso menos” fue la consigna de la movilización que realizaron ayer los trabajadores del Hospital Garrahan, quienes anunciaron que hoy se concentrarán a las 15 frente a la Legislatura porteña, para reclamar la aprobación, sin recortes, de los 1728 millones de pesos que debe aportar el gobierno porteño al presupuesto 2016 del establecimiento. Mientras el Congreso Nacional aprobó el aporte de los 1728 millones, la mitad del presupuesto para el hospital que debe aportar el Ejecutivo nacional, las autoridades del PRO anunciaron que sólo aportarán 1380 millones, lo que representa un recorte de 348 millones de pesos. El recorte significa una reducción del 20 por ciento respecto del presupuesto elevado en su momento por el Consejo de Administración del hospital.
“Este recorte no lo esperábamos y realmente pone en riesgo la calidad de la atención para el próximo año”, aseguró Aldo Haimovich, coordinador de Terapia Intensiva del Garrahan. El presupuesto solicitado por el Consejo de Administración representa un aumento del 40 por ciento respecto del monto fijado en 2015. Haimovich sostuvo que eso se justifica porque “el hospital está creciendo” dado que el año próximo se incorporará “el Centro de Atención al Niño Oncológico” y con el hecho puntual de que “hay obras pendientes que no se pudieron realizar en el 2015 por falta de presupuesto”. Además, hubo equipamiento que “este año no pudo renovarse, a lo que se suma el incremento salarial que tuvimos en agosto”.
Al tratar de justificar el recorte, las autoridades porteñas dijeron que al Garrahan le corresponde el mismo aumento porcentual que a los otros dos pediátricos de la Ciudad, los hospitales Gutiérrez y Elizalde. Como respuesta, Haimovich dijo que el Garrahan cumple “algunas funciones especiales” respecto de los otros pediátricos porteños, aunque aclaró que ellos quieren que “todos los hospitales tengan un presupuesto adecuado” y que sus demandas “no van en desmedro de los otros hospitales que desarrollan una tarea enorme”.
Los profesionales del Garrahan recordaron que en el hospital se realiza “el 60 por ciento de los trasplantes pediátricos del país, el 80 por ciento de los trasplantes hepáticos (este año se llegó a las 700 intervenciones de esa especialidad); se realiza más del 50 por ciento de las cirugías cardiovasculares de alta complejidad, y se brinda atención al 35 por ciento de los niños enfermos de cáncer en el país”.
El Garrahan cuenta con 513 camas, 137 de terapia intensiva y trasplantes, y por año egresan más de 25 mil pacientes. En sus consultorios externos son atendidos, en un año, 534 mil pacientes. Tiene 18 quirófanos en los que se realizan 11.000 cirugías , 800 de las cuales son cardiovasculares y una 900 neurocirugías. El hospital opera al 50 por ciento de los niños, de todo el país, que nacen con malformaciones cardíacas. También se producen 140 trasplantes de médula ósea, hepáticos, cardíacos, renales y pulmonares.
Haimovich resaltó que la incorporación del Centro de Atención al Niño Oncológico, significará que se duplicarán las camas de internación para trasplante de médula ósea, “lo que permitiría que la lista de espera se reduzca notablemente”. Al mismo tiempo, aumentarán en un centenar las camas para niños inmunosuprimidos que necesitan recibir quimioterapia.
El vocero de los profesionales del Garrahan recordó que “no es la primera vez que la Legislatura porteña aprueba un presupuesto recortado para el Hospital Garrahan respecto del aprobado por el Congreso Nacional: en 2014 la reducción fue de 113 millones y en 2015, de 226”. En este sentido, el juez subrogante del Fuero Contencioso Administrativo Tributario Francisco Ferrer dictó ayer una medida cautelar para que el gobierno porteño asigne al hospital la suma de dinero correspondiente a los recortes aplicados este año, en respuesta al amparo presentado en octubre pasado, como ciudadano, por Bernardo Fischberg.
“La medida cautelar ordena al gobierno porteño restituir al Hospital de Pediatría Juan Garrahan la diferencia entre la partida destinada para 2015 y la suma que le hubiera correspondido asignar según el decreto ley 815, aprobado en 1989.” La cédula del juzgado notifica al Gobierno de la Ciudad “su obligación de asignar la partida correspondiente al Hospital Garrahan, tanto el monto destinado a las obras de infraestructura como a los acuerdos paritarios de salarios”.
Durante la manifestación de ayer, los y las profesionales de distintos servicios del Garrahan fueron acompañados por los legisladores porteños Marcelo Ramal (FIT) y Juan Cruz Campagnoli (Nuevo Encuentro-FpV), quien declaró que “una vez más, con esta asignación presupuestaria se ratifica un nuevo recorte que confirma la desvalorización que tiene la administración de Macri por el sistema de salud público”.