Por: Juan Manuel Fontán
Entrevista exclusiva con el vicedirector de
la televisión rusa y experto en política internacional, Sergey Brilev, a
días de la cumbre del BRICS en la que participará Argentina. Qué tiene
Argentina para ofrecerle al bloque económico.
A una semana de la primera participación argentina en una cumbre de
los BRICS (el bloque económico compuesto por Brasil, Rusia, India, China
y Sudáfrica), INFOnews logró comunicarse con uno de los líderes de
opinión más respetados y populares del Rusia, el gigante que encabeza
junto a China este nuevo polo de poder mundial.
En una entrevista exclusiva, el subdirector de la televisión estatal
rusa, Sergey Brilev, analiza el potencial aporte de Argentina a BRICS y
hace hincapié en el aumento de las relaciones comerciales de los últimos
tiempos entre su país y la zona rioplatense. Además, define la
oportunidad de un organismo de financiamiento paralelo al FMI y cuenta
su experiencia como entrevistador de líderes mundiales.
-¿Qué significa la invitación a Argentina para la cumbre de los BRICS?
-Muchas cosas. Es muy lógico, por un lado, porque Latinoamérica
es una de las zonas más ambiciosas del planeta y está representada por
sus dos gigantes: Brasil y Argentina. Yo no estoy de acuerdo con que el
apogeo económico argentino haya terminado, creo que tiene mucho
potencial. Si está en el G20, debe estar en el BRICS. Yo no comparto la
versión radical antiimperialista del BRICS. No es productiva y hay que
ser realistas. Pero nosotros (Rusia), no estuvimos presentes cuando se
construyó el estado mundial financiero de hoy por el carácter socialista
de la economía; y Argentina tampoco, por otras razones históricas.
Ahora estamos en un mundo un poco raro donde, por ejemplo, debido al
hecho de que el dólar es la moneda universal, tú y yo, hablando por
Skype, financiamos a los Estados Unidos. Debe haber competencia,
primeramente. Es normal. Al dólar le añadimos el Euro y, aunque no lo
creas, el rublo ruso es de las monedas más convertibles libremente. Con
los reales brasileros no podés ir a Europa. Con el rublo podés ir a
Europa. El rublo se transformó en eso y estamos muy orgullosos. ¿Por qué
no usar el rublo o el yuan chino para algunos pagos internacionales?
BRICS sirve para esto.
-Significa crear lazos comerciales en monedas que no sean el dólar.
-Por ejemplo, vender el petróleo ruso a China. Los Chinos producen
algo con ese petróleo que luego venden a Rusia. Es un sistema
prácticamente autosuficiente. ¿Por qué pagamos en dólares entre
nosotros? Argentina y Brasil hicieron pactos en reales y pesos. Estas
cosas hay que desarrollarlas. Otra cosa es lo tecnológico-industrial.
Los rusos y los brasileros somos competidores en el mercado mundial de
aviones, pero hay muchas cosas en las que podríamos llegar a ponernos de
acuerdo.
-¿En qué áreas podría aportar Argentina específicamente?
-En lo espacial, lo nuclear, lo energético, por poner algunos
ejemplos. Si en Argentina hoy se vive una crisis energética, ¿por qué no
lanzar todos esos planes industriales?
-¿A qué te referís con lo “espacial”?
-Me refiero a los observatorios argentinos. Participan con los
rusos en sistemas de vigilancia del espacio hoy en día. Poca gente sabe
eso. También hay un tema de cooperación entre el Mercosur y la Unión
Aduanera acá. Las zonas francas del Mercosur para lo logístico y
producción de cosas. Los camiones rusos Kamaz, que ganan el Dakar, se
producen en Tatarstán. En Brasil los chasis de esos camiones ya se usan
para los ómnibus Marcopolo.
-Julio De Vido estuvo en Rusia y China buscando inversiones para ese área justamente.
-Ahora, organizando una conferencia en Montevideo, he visto interés por parte de los inversionistas rusos en ir a la Argentina.
-Hay hace tiempo un acercamiento entre Rusia y Argentina.
Hace poco más de dos meses se firmó un acuerdo de exportación de carne
argentina a Rusia.
-En eso no hay nada nuevo. Si analizás el estado de cosas en el
comercio bilateral ruso-argentino de los últimos 20 años, el ejemplo
más grande es el de los años 80, 81 y 82, cuando la economía comunista
de la Unión Soviética ya no funcionaba y estaba bajo el bloqueo
occidental y cuando, paradójicamente, el gobierno militar argentino
eligió no participar de ese bloqueo y exportaba carne argentina al
mercado soviético. Ese mercado llegaba a 2 billones de dólares de aquel
tiempo, que es un número enorme. Importaban carne y trigo. La Rusia
moderna de hoy es exportadora de trigo y los rusos y argentinos somos
competidores en ese mercado. No excluyo que Rusia se convierta en
exportadora de carne en los próximos años.
-Argentina le vendió embriones a Rusia. Es como exportar razas.
-Eso es interesante y es inexplicable por qué no está Argentina
involucrada en esta industria ya. Por ejemplo, en la comitiva rusa que
viene a mi conferencia a Uruguay (a la inauguración del Instituto
Bellinghaussen para las Américas) , viene el presidente de la República
de Tatarstán, quien hace un par de años trajo un avión de vacas vivas
desde Australia, ahora está trabajando en el tema de embriones. Están
colaborando con Rusia los canadienses, los australianos, los
neozelandeses y los estadounidenses. ¿Dónde está la República Argentina?
Rusia impota, por ejemplo, fideos. Esos vienen de Italia o de otros
países. Podemos comprarle a los italianos, pero también los argentinos,
lo cual será más barato. ¿Por qué no pensar ahí?
Brilev es uno de los líderes de opinión más importantes de Rusia.
Además de ser el subdirector de la televisión estatal de su país, es uno
de los periodistas que más jefes de estado ha tenido la oportunidad de
entrevistar cara a cara. Desde George Bush, Barack Obama y David
Cameron, pasando por Vladimir Putin, Dimitri Medvedev y hasta miembros
de la familia Castro, Michelle Bachelet, Daniel Ortega y Hugo Chávez.
Sin embargo, su cuenta pendiente sigue siendo Cristina Kirchner.
Además, Brilev está especializado en latinoamérica desde su
nacimiento, cuando fue en tierra cubana que su madre le dio a luz.
También pasó parte de su infancia en Uruguay, por lo tanto su español es
casi perfecto. Actualmente se encuentra por inaugurar el Instituto
Bering-Bellingshausen para las Américas (IBBA), cuyo objetivo es
estrechar las relaciones comerciales entre la zona rioplatense y Rusia.
¿Ves alguna ventaja en especial en la zona del Río de la Plata?
-Argentina, a pesar del desequilibrio económico, tiene una ventaja
muy seria que comparte con toda la región rioplatense. El PNB (Producto
Nacional Bruto) per cápita es prácticamente igual al ruso, 16 o 18 mil
dólares por persona. En Europa están en 32 o 33 y en Estados Unidos
cuarenta y pico. Económicamente estamos a la par, pero si venís a Moscú y
comparás precios, te darás cuenta que los precios de muchos productos
son 20, 30 o 40 por ciento más caros que en Europa. Sin embargo, en
Argentina el nivel de precios refleja mejor el nivel de ganancias. Si en
un mercado de precios rusos, producen cosas alimentos a precio
argentino, el margen de ganancias va a ser mucho más ventajoso.
-En Argentina el periodismo es muy escéptico con las
posibilidades de Argentina a entrar a BRICS. Vos, con el acceso a la
información que tenés, ¿crees que se equivocan?
-Esperamos a que vengan los argentinos a la cumbre y discutan
cosas. Lo que me parece que puede ser muy útil para Argentina es
involucrarse en el proyecto interbancario de BRICS, porque está creando
un fondo de apoyo a las economías frente a la crisis sin tener que ir al
FMI. Es un organismo paralelo. Es muy lógica la decisión porque el FMI
ya no refleja el estado de cosas de la economía de hoy. O sea, los
países líderes del mundo en desarrollo no están adecuadamente
representados en organismos como ese o el Banco Mundial. BRICS llegó a
la conclusión de crear un mecanismo propio. Creo que eso sería ventajoso
para la Argentina.
-Has entrevistado a muchos mandatarios de latinoamérica, por
ejemplo a Hugo Chávez. ¿Qué recuerdos tenés de tus encuentros con él?
-Chávez fue una persona muy interesante. Antes de encontrarme
con él por primera vez, tenía esa imagen de orador populista. Yo tuve la
suerte de encontrarme con alguien que lo conocía bastante bien. Le
pregunté a esa persona con qué me iba a encontrar, cómo tenía que
portarme. El señor me dijo que me iba a encontrar con una persona muy
diferente a la imagen pública. Tuvo razón. Me he encontrado con Chávez
cuatro o cinco veces. Fue un tipo sorprendentemente pensador, muy
tranquilo en circunstancias privadas. Tenía una agenda en la que creía,
pero estaba dispuesto a pensar y a discutir. Si te encontrabas con él en
circunstancias públicas, era otra cosa. Era un tipo muy interesante. Yo
tuve el privilegio de conocerlo. No necesariamente estaba de acuerdo
con sus ideas, pero era un tipo muy especial.
-Si pudieses entrevistar a Cristina Kirchner, ¿cuál sería la pregunta central de tu entrevista?
-Ignoraría lo puramente argentino doméstico. Hablaría con ella
sobre lo que hablamos en esta entrevista. La visión de ella del mundo.
Norte, sur. Países en desarrollo y desarrollados. Coincidencias y
conflicto. Si hablás con los argentinos de la agenda argentina se repite
lo mismo de lo que se habla en Rusia. Son países muy similares.
Producción:
Katerina Medvedeva, editora de
Russia Beyond the Headlines en Argentina y Uruguay.