"Qué papel han jugado los intelectuales en este proceso histórico? Los intelectuales no integran una clase social. Oriundos generalmente de la pequeña burguesía marchan a la deriva de la clase dirigente. Apartados por conveniencia de la lucha nacional, en los momentos de crisis se siente invadidos por al inquietud de las clases altas y sufren vivamente esta situación señalada por el conservador T.S. Elliot:
< Las actitudes y creencias del liberalismo estándestinadas a desaparecer y a estándesapareciendo. Corresponden a una edad ñlibre que ya ha pasado, y el peligro que ahora corremos es que el término libaralismo pueda llegar a significar para nosotros únicamente, el desorden cuyos frutos heredamos y no elvalor permanente del elemento negativo. Del propio liberalsimo derivan filosofías que lo jiegan.>
Los intelectuales argentinos que se destacan después de 1930, reflejan bien el clímax espiritual del período con su adhesión a las clases encumbradas por encima de las masas. Forman la áurea vanguardia pensante en medio del fraude. Y en 1955, después de una década de silencio oficial, vuelven como mártires del mito ferino de la libertad. Por su origen de clase, comprenden la contradicción que los desgarra y oscilan entre el izquierdismo académico y las sinecuras oficiales. En estos momentos de crisis, los intelectuales adoptan una posición equívoca, orientada en varias direcciones posibles. El temor a los sacudimientos del subsuelo que amenazan su estabilidad-la revolución desde abajo-se transfigura misteriosamente en
Enero de 1957.
Prof GB