Sergio Federovisky es el titular de la Unidad Ejecutora de Agencia Ambiental de la Municipalidad de La Plata. Pocos saben que el biólogo y periodista “especializado” en ambiente, autor de los libros El medio ambiente no le importa a nadie (Planeta, 2007) y La historia del medio ambiente (Capital Intelectual, 2007), fue vocero del ex ministro de Economía Roberto Lavagna, periodista del diario Clarín y conductor del video documental Sábalos de la Maldad.
Tampoco es muy difundido que -como buen alumno de Clarín- el funcionario de Pablo Bruera es un fuerte crítico del gobierno kirchnerista, pero que parece no enterarse de los conflictos ambientales que la gestión para la que él trabaja tiene, por ejemplo, con el Parque Industrial del Sur y el CEAMSE.
Lo cierto es que el actual presidente de la Agencia Ambiental también fue vocero de la ex secretaria de Medio Ambiente de la Nación, María Julia Alsogaray quien ha sido condenada en marzo de este año a prisión domiciliaria por el delito de administración fraudulenta en perjuicio del Estado en la causa por irregularidades en contrataciones para refaccionar el edificio donde funcionó la Secretaría de Recursos Naturales, hoy Secretaría de Ambiente y Desarrollo Sustentable.
Además de todo eso habría que recordar que durante la gestión del “especialista en ambiente” Sergio Federovisky, La Plata sufrió una inundación que quedará en la memoria de todos los argentinos y argentinas, y donde sus socios de Clarín y a TN omitieron la responsabilidad que el funcionario tenía (y tiene) con esa trágica jornada. Recordemos que durante esa época el funcionario periodista no sólo tenía un programa ambiental en cable, además de actuar en otro de la televisión abierta, Tercera Posición, programa conducido por Rolando Graña. En medio de la tragedia, dichos medios sólo parecían preocupados por las pecheras que llevaban puestos los miles de militantes que sin dormir salieron a asistir a los vecinos y vecinas.
El jueves pasado, 23 de julio, se los vio a orillas del Riachuelo, junto a un coro importante de organizaciones “independientes” de la sociedad civil y otros actores de la política nacional, entre los que se destacó a Facundo Moyano, candidato a diputado por el Frente Renovador, hijo del líder sindical camionero y empresario de Covelia, empresa que hace ya varios años se estableció en los terrenos pertenecientes a la Laguna Santa Catalina, una de las áreas ambientales protegidas de la Cuenca Matanza-Riachuelo, considerada de las más ricas en biodiversidad. Los vecinos vienen reclamando el retiro de la empresa de esa laguna, que hoy está seca debido al desmonte y los rellenos que ha realizado la empresa en el lugar. Claro que el candidato a diputado no mencionó ninguna acción prevista al respecto pero se mostró muy interesado en declarar que quiere impulsar una comisión bicameral, cuando sea diputado, para tratar las mejoras en la Cuenca.
Todos se ocuparon de criticar al gobierno que más hizo por el saneamiento de la Cuenca Matanza-Riachuelo, invisibilizando no sólo las mejoras que ha tenido el río en su calidad de agua y aire, sino también a los habitantes de nuestra cuenca.
Sergio Federovisky tiene una extraña plasticidad política, resulta que ahora “acompaña” a Massa en su cruzada por la presidencia. Sin embargo, nosotros nos preguntamos: ¿Masa no fue acaso jefe de Gabinete de este gobierno, y tuvo a su cargo la limpieza del Riachuelo?
Esos señores nos hacen acordar a María Julia y su promesa de los 1000 días. Seguramente tienen información obsoleta y han caminado poco los municipios que forman parte de la cuenca, pero... (diría el profe Romero) se atreven a “firmar” compromisos de lo que se va a hacer con el Riachuelo en caso (casi imposible) de llegar a la silla de Balcarce 50. Y resulta mucho más patético que ninguno de los hipercríticos ambientalistas y sus ONG, que ofician de corifeos, digan nada. Pecan de una amnesia total, ya no recuerdan las promesas de los '90 y todo el daño que hicieron, pero para peor, han sembrado miseria, hambre y desocupación en la Cuenca Matanza-Riachuelo. Cuenca que hoy se recupera de la mano del gobierno y su –nuestro- proyecto de inclusión y participación que promete un futuro con todos y para todos. «
Tampoco es muy difundido que -como buen alumno de Clarín- el funcionario de Pablo Bruera es un fuerte crítico del gobierno kirchnerista, pero que parece no enterarse de los conflictos ambientales que la gestión para la que él trabaja tiene, por ejemplo, con el Parque Industrial del Sur y el CEAMSE.
Lo cierto es que el actual presidente de la Agencia Ambiental también fue vocero de la ex secretaria de Medio Ambiente de la Nación, María Julia Alsogaray quien ha sido condenada en marzo de este año a prisión domiciliaria por el delito de administración fraudulenta en perjuicio del Estado en la causa por irregularidades en contrataciones para refaccionar el edificio donde funcionó la Secretaría de Recursos Naturales, hoy Secretaría de Ambiente y Desarrollo Sustentable.
Además de todo eso habría que recordar que durante la gestión del “especialista en ambiente” Sergio Federovisky, La Plata sufrió una inundación que quedará en la memoria de todos los argentinos y argentinas, y donde sus socios de Clarín y a TN omitieron la responsabilidad que el funcionario tenía (y tiene) con esa trágica jornada. Recordemos que durante esa época el funcionario periodista no sólo tenía un programa ambiental en cable, además de actuar en otro de la televisión abierta, Tercera Posición, programa conducido por Rolando Graña. En medio de la tragedia, dichos medios sólo parecían preocupados por las pecheras que llevaban puestos los miles de militantes que sin dormir salieron a asistir a los vecinos y vecinas.
El jueves pasado, 23 de julio, se los vio a orillas del Riachuelo, junto a un coro importante de organizaciones “independientes” de la sociedad civil y otros actores de la política nacional, entre los que se destacó a Facundo Moyano, candidato a diputado por el Frente Renovador, hijo del líder sindical camionero y empresario de Covelia, empresa que hace ya varios años se estableció en los terrenos pertenecientes a la Laguna Santa Catalina, una de las áreas ambientales protegidas de la Cuenca Matanza-Riachuelo, considerada de las más ricas en biodiversidad. Los vecinos vienen reclamando el retiro de la empresa de esa laguna, que hoy está seca debido al desmonte y los rellenos que ha realizado la empresa en el lugar. Claro que el candidato a diputado no mencionó ninguna acción prevista al respecto pero se mostró muy interesado en declarar que quiere impulsar una comisión bicameral, cuando sea diputado, para tratar las mejoras en la Cuenca.
Todos se ocuparon de criticar al gobierno que más hizo por el saneamiento de la Cuenca Matanza-Riachuelo, invisibilizando no sólo las mejoras que ha tenido el río en su calidad de agua y aire, sino también a los habitantes de nuestra cuenca.
Sergio Federovisky tiene una extraña plasticidad política, resulta que ahora “acompaña” a Massa en su cruzada por la presidencia. Sin embargo, nosotros nos preguntamos: ¿Masa no fue acaso jefe de Gabinete de este gobierno, y tuvo a su cargo la limpieza del Riachuelo?
Esos señores nos hacen acordar a María Julia y su promesa de los 1000 días. Seguramente tienen información obsoleta y han caminado poco los municipios que forman parte de la cuenca, pero... (diría el profe Romero) se atreven a “firmar” compromisos de lo que se va a hacer con el Riachuelo en caso (casi imposible) de llegar a la silla de Balcarce 50. Y resulta mucho más patético que ninguno de los hipercríticos ambientalistas y sus ONG, que ofician de corifeos, digan nada. Pecan de una amnesia total, ya no recuerdan las promesas de los '90 y todo el daño que hicieron, pero para peor, han sembrado miseria, hambre y desocupación en la Cuenca Matanza-Riachuelo. Cuenca que hoy se recupera de la mano del gobierno y su –nuestro- proyecto de inclusión y participación que promete un futuro con todos y para todos. «
