Por Franco Spinetta
En la búsqueda de consenso para avanzar con la aprobación del Presupuesto 2017, el oficialismo acordó con el Frente Renovador y el Bloque Justicialista un incremento de 1280 millones para el Ministerio de Ciencia y Tecnología. Para el prestigioso científico y director del Instituto de Fisiología, Biología Molecular y Neurociencias (IFIBYNE), Alberto Kornblihtt, el incremento es “insuficiente”. “En realidad es muy inferior al aumento que debería ser para evitar realmente el recorte”, aseguró.
-¿Qué análisis hace del aumento presupuestario otorgado por el oficialismo para la partida de Ciencia y Tecnología?-Se está tratando de dar el mensaje a la población de que hubo un aumento de 1280 millones de pesos. Pero en realidad es muy inferior al aumento que debería ser para evitar realmente el recorte a toda la finalidad de Ciencia y Tecnología. Faltarían aproximadamente 3200 millones de pesos más, teniendo en cuenta el porcentaje de aumento global del Presupuesto 2017 Y la inflación. Los 1280 millones son insuficientes. Una de las instituciones que va a sufrir más es el Conicet, con el presupuesto que tiene asignado, ya que no va a tener fondos suficientes para afrontar los gastos de funcionamiento de los institutos y se pone un coto a los ingresos a la carrera de Investigador del Conicet. Si se aprueba así, sería el presupuesto más bajo para el Ministerio de Ciencia y Tecnología desde su creación. No hubo actualización de los valores de los insumos que son en dólares y que fueron afectados por la devaluación.
-¿Cómo impactará esta situación en el corto plazo?
-La reducción en el número de ingresantes a la carrera de Investigador va a en contra del Plan Argentina Innovadora 2020, donde se planteaba el objetivo de tener 5 investigadores por cada mil habitantes de la población económicamente activa. De los diez mil investigadores que tenemos ahora, habría que llegar a 15 mil en 2020. Pero así se hace difícil.
-Es decir que ve un futuro negro para el sector.
-Confío mucho en la movilización de los científicos y cómo repercute esto en la población. Hay una sensibilidad latente. Además está el consenso de que la ciencia y la técnica son importantes, esto tiene que llegar a buen puerto. Lamentablemente este gobierno ya ha decidido reducir la recaudación fiscal mediante la eliminación de retenciones a la agricultura y la minería y se está financiando con crédito externo. Justamente el rubro que más aumenta en el Presupuesto son los Servicios de Deuda Pública, entonces se producen ajustes en sectores como ciencia y técnica para poder afrontar ese gasto. Cuando Macri era candidato decía que iba elevar a 1,5 del PBI la inversión en Ciencia. Me resulta contradictorio que la primera medida que toma sea recortar el presupuesto.
-¿Cuál es el rol que debería tener Barañao en este caso?
-No es una cuestión de nombres. No propiciamos la renuncia de ninguna autoridad. ES una cuestión de política de Estado sobre el rol de la ciencia y la tecnología, y del modelo económico. Nos preocupa la reducción del papel impulsor del Estado, el mayor sometimiento al mercado, y tememos una nueva ola de éxodo de jóvenes investigadores. Obviamente que como se trata del mismo ministro, esperamos que defienda todo lo logrado.