sábado, 1 de noviembre de 2014

Carta abierta a Jorge Lanata, por Guillermo Fernández

Una reflexión sobre el periodista estrella del Grupo Clarín.
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Por Guillermo Fernández
Estimado Jorge:
Le escribo en nombre de los artistas que permanentemente somos agredidos por mostrar simpatía por este gobierno, porque adherirnos a un proyecto de país diferente al que usted pretende.
Cuando malintenciona o inventa informes acerca de políticos, empresarios o intelectuales, como el caso de los bolsos de Boudou, cargados con dinero viajando al Uruguay, las bóvedas de Lázaro Baez, la escala de la Presidenta de la Nación en una isla para dejar valijas atestadas con dólares o tantas otras infamias, se enfrenta a pesos pesados, que poseen una estructura en defensa, y un soporte espiritual enorme.
Inclusive cuando manipula números de contratos, declarando cifras de compañeros como Victor Hugo Morales, allí se enfrenta con un profesional de su talla, un hombre con una capacidad inusitada para defender una postura, además de la honestidad e integridad que lo respaldan. Allí Jorge, usted está batallando casi de igual a igual, aunque entendiendo el poder hegemónico que lo ampara, no parece ser tan así. Siento que cuando en la Argentina se habla de Medios de Comunicación, el oficialismo son ustedes.
Sin embargo, cuando entra en nuestro espacio, entra en un terreno donde la sensibilidad impera, donde la capacidad de contraataque es escasa, sin la artillería pesada de producción que usted posee para armar las investigaciones. Esto, no otorga derecho a cometer actos de corrupción, pero tampoco a manipular informes para poner a un sector de la población en contra de sus queridos artistas.
Usted Jorge, posee la capacidad de manejar un sinnúmero de recursos, tiene la posibilidad de enfrentarse al Poder Ejecutivo, a los Ministerios, a cualquier organismo oficial, al INCAA, hasta inventar que el ARSAT 1 está cargado con cocaína puesto que el Gobierno Nacional opera con narcos de otros planetas, usted tiene todo eso y mucho mas. Debería darse cuenta que inviste un caparazón extra, que no tenemos. Allí Jorge, entre artistas, usted se mueve como lobo salvaje en un corral, como Bush en terreno afghano.
Cuando un artista sale a la calle y es injuriado por una señora descerebrada debido a sus malintencionados informes la angustia se instala, raudamente, sin filtro previo, la tristeza ingresa y paraliza.
Por eso, le pido que cuando suba a los tablados del Maipo o a los escenarios de su programa de Stand Up, no olvide que usted es un periodista militante, los artistas estamos en otro espacio.
P.D. A veces siento que puedo adivinar el desasosiego de Enrique Santos Discépolo, cuando agonizaba de angustia, mientras mucha gente se iba preparando para saludar desde las terrazas porteñas a los aviones que iban a bombardear Plaza de Mayo.

"La nueva Ley de Telecomunicaciones no modifica la de Medios sino que la potencia"

Así lo expresó el titular de AFSCA, Martín Sabbatella. "Privilegia la posición del usuario, amplia derechos y profundiza la libertad de expresión", describió.
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“La nueva norma significa un avance importantísimo para las telecomunicaciones de nuestro país por los próximos largos años, y un paso adelante hacia la convergencia en los medios de comunicación; lo que generará mayor competencia entre las empresas y dará como resultado una mejor calidad del servicio para todo el pueblo argentino”, sostuvo esta mañana el titular de AFSCA, Martín Sabbatella, en relación al proyecto de ley, presentado ayer por el Ejecutivo nacional, que declara a las tecnologías de la información y comunicaciones (TICs) como un servicio público, esencial y estratégico.
"Con esta nueva ley se abrirán las puertas para un desarrollo más integrado y equitativo de la industria de las telecomunicaciones. Un desarrollo que pone el acento en el acceso inclusivo y democrático de los usuarios, y que también favorecerá a las pymes y las cooperativas del sector comunicacional, generando más competencia y más trabajo", agregó.
“Es falso que la ley de Argentina Digital modifique a la Ley de Servicios de Comunicación Audiovisual. La nueva norma no solo no cambiará la ley de medios sino que además la potenciará”, afirmó Sabbatella sobre la iniciativa, que será enviada al Senado por la presidenta Cristina Fernández de Kirchner, y detalló que “lo que hace el proyecto es exceptuar a las TICs de la prohibición de prestar servicios de comunicación audiovisual, para garantizar que todas las empresas puedan dar todos los servicios”.
“Este proyecto de ley pone a las telecomunicaciones de Argentina en absoluta sintonía con las nuevas tecnologías, como lo están haciendo muchos países en el mundo, y al mismo tiempo profundiza la democratización de las comunicaciones, al considerar el acceso a la comunicación como un derecho humano”, sostuvo Sabbatella y agregó que “eso es lo más importante de esta norma, que privilegia la posición del usuario, amplia derechos, profundiza la libertad de expresión y garantiza que el conjunto del pueblo argentino pueda acceder en igualdad de condiciones a todas las tecnologías de la información y la comunicación

"La ley debe incluir mayores exigencias a las telefónicas"

El especialista Martín Becerra analizó en diálogo con AGENCIA PACO URONDO el proyecto del Gobierno Nacional para regular las telecomunicaciones.
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Por Enrique de la Calle
APU: Antes de ingresar en aspectos específicos del proyecto de ley. ¿Cuál es su impresión general sobre la propuesta del Gobierno Nacional sobre Telecomunicaciones?
Martín Becerra: En términos generales, es una ley que aspira a regular el proceso de convergencia entre las telefonías, tanto fijas como móviles, la comunicación audiovisual, internet. Son servicios que comparten infraestructuras, que pueden ser prestados a través de redes fijas o móviles. Por lo tanto, tener una regulación que insista en separar esos sectores es muy ineficaz a la hora de garantizar que funcionen bien. Esto es, que presten servicios adecuados a la ciudadanía, que tengan tarifas razonables. Tener una ley, como ocurre ahora, que no contemple esa convergencia es algo problemático. Muchos países del mundo están revisando sus legislaciones, es bueno que la Argentina también lo haga. Es lógico que no se pueda acompañar el vértigo con el que se desarrollan las tecnologías, pero es necesario ir poniéndose al día.
APU: ¿La actual ley de Telecomunicaciones es totalmente obsoleta?
MB: Sí. Es un decreto-ley de 1972. Tuvo modificaciones cuando se privatizó Entel durante el primer gobierno de Carlos Menem o con la Alianza, en 2000. Es un decreto viejo, obsoleto, que ha tenido modificaciones, no todas muy coherentes entre sí. Es un marco bastante cambalache que debe ser modificado por una ley más integral, que sea coherente en todos sus aspectos.
APU: Salgo un momento de Argentina: ¿México y Brasil están avanzando en leyes similares?
MB: Cada uno a su manera. Diría más México, que Brasil. México sacó recientemente una ley de Telecomunicaciones que es muy resistida. Fue sancionada este año después de una reforma constitucional muy interesante. Más allá de las consideraciones que podamos hacer, se trata de una ley que busca regular la convergencia. Colombia tiene también una ley de TICs. Brasil tiene una ley (de abril de este año) que no regula la convergencia pero que sí se mete con internet.
APU: Cuando uno ve el mapa de las telecomunicaciones de Argentina, se observa que hay cuatro empresas (Telmex, Telecom, Telefónica y Grupo Clarín), que controlan el 80% del mercado. ¿Es así?
MB: Es así, es un sector híperconcentrado. Cuando uno plantea esto, aparecen las empresas diciendo que eso es así en todo el mundo, lo cual también es cierto. Eso debe ser señalado: el de las telecomunicaciones es un sector con mucha concentración en todo el mundo. Por eso, como está muy concentrado es muy regulado en muchos países. Para evitar, justamente, que esa posición dominante de las empresas perjudique a los ciudadanos. En la Argentina eso no pasa.
APU: ¿Hay que asumir, entonces, que el sector de las telecomunicaciones, por su propia dinámica, está dominado por grandes empresas? ¿Ante esa situación, la única salida pasa por leyes muy duras?
MB: Es así. Hay pocos actores y grandes. Lo que es deseable, en una política pública inclusiva, es que esos pocos actores estén fuertemente regulados. Y que en algunos segmentos de su mercado estén impedidos de participar. Esto puede sonar paradójico, pero está presente en el proyecto que presentó el Gobierno. Esto significa que si una gran empresa presenta una infraestructura de red muy extendida tenga la obligación de facilitar a competidores más pequeños, como cooperativas o PYMES, a usar su red. Que la tengan que alquilar a un precio que establezca el Estado. Entonces, esas pequeñas empresas pueden usar esa red para brindar servicios domiciliarios. Se supone que esa actividad le agrega competencia a un mercado que tiene tendencia a la concentración.
APU: ¿Este proyecto de ley cómo se lleva con la ley de Medios? ¿La complementa o la modifica?
MB: Se puede ver de las dos maneras. La modifica en un punto que seguramente es muy celebrado por los gerentes de Telefónica de España, porque exceptúa del cumplimiento de una prohibición de la ley de Medios a las telefónicas. Un artículo de la ley de Medios impide que las empresas que brindan servicios públicos puedan brindar comunicación audiovisual. Esta ley exceptúa a las telefónicas. De este modo, Telefónica va a poder resolver su incómoda situación en relación a Telefe, que es el principal canal de televisión abierta de Argentina. Además, va a poder meterse en la televisión por cable, lo que seguramente irrita a Clarín. Por supuesto, tiene que respetar los límites que establece la ley de Medios.
APU: ¿El Grupo Clarín, una vez resuelta su adecuación, podría dedicarse a la telefonía?
MB: Es así. Habilita el cruce de telefonía a audiovisual y al revés. Por la escala de las empresas que se dedican a telefonía, éstas arrancan con ventaja. Que una ley permita las dos cosas no significa que eso ocurra en lo inmediato. Por eso, una de las críticas que tengo a este proyecto tiene que ver con la necesidad de incluir mayores exigencias a las telefónicas para pasarse a la comunicación audiovisual. Eso estaba contemplado en la primera versión de la ley de Medios que se presentó en 2009. Por ejemplo: que demuestren que son competitivas en su sector antes de que se facilite el pasaje a lo audiovisual. Eso forma parte de la lógica de regulación en muchos países.
APU: ¿La inclusión de esas mayores regulaciones a las telefónicas es incompatible con el proyecto tal como está redactado?
MB: No, para nada. Para dar una idea general sobre el proyecto, creo que tiene una orientación que es necesaria para la regulación argentina. Tiene principios generales que son muy importantes. Y tiene algunas ambigüedades y disposiciones que deben modificarse.
APU: El proyecto habla de regulaciones en torno a “posición significativa del mercado”. ¿Qué implica eso?
MB: Eso es otra cuestión que hay que modificar. El proyecto habla de “posición significativa de mercado”. Es muy importante. Ahora, el proyecto no es muy preciso para definir cómo considera “posición significativa”. Además, como le reserva a la autoridad de aplicación muchos aspectos, también le deja esa definición. Creo que la ley debería precisar esa situación, porque si no, va a variar según el Gobierno de turno. Para Cristina va a significar una cosa hasta diciembre de 2015 y para Massa, Macri o Scioli puede significar otra muy diferente. Eso agrega incertidumbre y desprotege a los usuarios.
APU: Más allá de la necesidad de precisar qué se entiende por “posición significativa”. ¿Qué propone el proyecto para los casos incluidos en esa definición?
MB: Le permite al Estado mayor regulación. Por ejemplo, le puede pedir a las empresas que se dividan funcionalmente, que se separen. Puede regular más activamente las tarifas. Le otorga posibilidades de intervención mucho más importantes.
APU: En general, ¿las leyes de otros países cómo definen “posición significativa”?
MB: Hay muchas bibliotecas y hay diferentes definiciones sobre qué se entiende por eso, qué porción de mercado se corresponde con una “posición significativa”. Ese es el problema, por eso es necesario precisarlo en la ley.
APU: Si tuviera que describir cuán bueno o cuán malo es el servicio de telecomunicaciones en el país. ¿Qué diría?
MB: Trato siempre, en cada entrevista, de hacer un esfuerzo para colocarme en el rol de profesor. Intento proponer un análisis que no esté atravesado por las pasiones. Tu pregunta apela a la pasión. Diría que las telecomunicaciones son espantosas, no hay una comunicación móvil que se pueda realizar en términos razonables. Es un servicio que tiene que mejorar mucho.

y dice que Peron es un viejo facho

Música Marcial Francesa La Victoire est a nous A Vitória é nossa


This opening title sequence, accompanied by the song "Going Home" by Mary Fahl, is from Ronald F. Maxwell's 2002 film "Gods and Generals" Enjoy in full high ...

9 de octubre a la(s) 6:01 · EZEQUIEL GONZALEZ VILLAR.

algunas de sus lindezas de fasebuque

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El presidente Perón en la caballeriza presidencial, junto a la yegua que perteneció a María Eva Duarte de Perón, 11 de noviembre de 1952. Documento Fotográfico. Inventario 198272

AYER Y HOY

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