miércoles, 27 de marzo de 2013
IGLESIA ARAMBURU Y MONTONEROS.
La Iglesia, los´70 y funeral después de William Morris
Martes 19 de Marzo de 2013
Por: José Luis Ponsico I El lunes 7 de setiembre de 1970, a las 20.35, Bar y Pizzería "La Rueda" el jefe y fundador de la organización Montoneros, Fernando Abal Medina, departía con su amigo y compañero Gustavo Ramus, cuando ingresó un grupo policial fuertemente armado de la Bonaerense y se produjo un violento tiroteo. Hubo muertos y heridos. Abal y Ramus cayeron acribillados. Norma Arrostito pudo huir.
Fundadores de una de las más fuertes expresiones de la lucha armada de raíz peronista. Quizá una de las que congregó la mayor cantidad de militantes en todo Latinoamérica hace 40 años. Se hablaba de más de 6 mil seguidores del grupo estrictamente guerrillero. Dos jóvenes. Junto a Norma Arrostito y Mario Eduardo Firmenich habían planificado el secuestro del general Pedro Eugenio Aramburu, 29/5/70. A fines de los ´60 la dictadura del general Juan Carlos Onganía había dejado sin voces a las clases populares.
El 16/9/55 se alzó la "Revolución Libertadora". El jefe del Ejército, militar nacionalista Eduardo Lonardi. A partir del 9 junio del´56, denominada "Fusiladora" por ejecuciones del general peronista Juan José Valle y coronel Oscar Lorenzo Cogorno. Ellos quisieron desalojar a los que derrocaron al gobierno constitucional del general Juan Domingo Perón. Saldo: 14 militares y una decena de civiles, fusilados.
Lo que sigue es reconstrucción de distintos autores (Gabriela Saidon, "La Montonera"; Editorial Sudamericana 2005; Alejandro Tarruella, "Guardia de Hierro", Sudamericana´05) además de crónicas periodísticas. Se indica que también estaba Firmenich -aparentemente en un auto- y huyó en medio del tiroteo provocado por varios policías, dos de ellos cabos que rodearon la mesa "de los sospechosos".
La revista "Así", dedicada exclusivamente a la crónica policial, uno de los hallazgos de Héctor Ricardo García, comienzo de los´ 60 -con tirada y venta de ejemplares superando las 400 mil publicaciones semanales- describe con detalles velatorio, luego funerales de los militantes Montoneros rodeados de "sacerdotes del tercer mundo" y representantes de la "Iglesia oficial", dice.
"Así" titulaba: "El adiós a dos Montoneros". Imágenes de la misa en la Iglesia de San Francisco Solano. "En una de las fotos se observa a los dos ataúdes cubiertos con la bandera de guerra, Argentina", reproduce Saidon en su libro dedicado a la vida y militancia de Norma Arrostito.
"El origen de las coronas llegadas al domicilio de Fernando Abal Medina, calle Moreno 1130 de Capital Federal, a sus padres Carmen Medina y Antonio Abal, resumen el momento ideológico que se vivía desde los grupos enrolados en el peronismo y opositores al régimen", añade la autora. Se leía "Tus compañeros en Cristo". Y hasta una corona "del mismísimo general Perón", abunda.
Fernando Abal Medina y Gustavo Ramus eran católicos. Cercanos a la Iglesia desde la primera adolescencia. El Padre Carlos Mugica brindó una despedida. "Los hermanos Fernando y Carlos están con el Señor", dijo. "Debemos seguir con Cristo en el camino de la causa de los desprotegidos; no caer en la indiferencia sin comprometernos", sostuvo el "cura de los pobres". Asesinado en el mismo lugar cuatro años más tarde.
El sacerdote Hernán Benítez, teólogo reconocido, cura confesor de María Eva Duarte de Perón, tomó la palabra. "Vivimos en una Nación que sirve para el goce de unos pocos y el sacrificio de muchos", empezó diciendo uno de los artífices del Congreso de Filosofía, 1949, en Mendoza, veinte años antes, inspirador de "Conducción política", de Juan Perón.
"A los ojos de Dios cuando reclama "Dad de beber al sediento" respondido con por Fernando y Gustavo con sus vidas, tal vez con errores y aciertos, pero para que en el mundo no hubiera más sed ni hambre de los desposeídos", describió el cura Benítez que en los´60 se había distanciado de Perón.
Benítez fue más lejos: "Señor, te pido perdón por esto. Por lo ocurrido con éstos jóvenes. De algo que nosotros somos culpables al punto que los dos jóvenes fueran acribillados a balazos", impactó el sacerdote en un momento de notoria emotividad según las crónicas de la época.
Otro referente de la Iglesia y la Revolución, Jaime Dri, cuando analiza a la Iglesia ecuménica y dice que "ya en 1958 las cosas habían cambiado con la entronización de Juan XXIII en lugar de Pío XII (Eugenio Pacelli) líder del Vatciano en una etapa donde aparecía una Iglesia cerrada en sí misma; monárquica y autoritaria", explica Dri también militante rvolucionario en los´60 y 70.
"Una ola revolucionaria desde la Iglesia, arrastró a las juventudes del mundo", siguió Dri a la hora de explicar la participación de una notoria transformación "cultural, política y social" hace 45 años y en la que la juventud de la Argentina no estuvo ausente. Onganía se fue después del "Cordobazo" en mayo del´69. La dictadura militar siguió con Roberto Levingston y Alejandro Lanusse. Los´70 serían signados por la tragedia política. Otros tiempos.
El autor es periodista de la agencia Télam. Militante peronista y miembro del Sindicato de Prensa de Mar del Plata. Debió irse cuando la dictadura genocida secuestró al secretario general Amílcar González y descabezó la militancia en Prensa.
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