sábado, 31 de marzo de 2012

MACRI y TEJEDOR; ROCA-AVELLANEDA y NOSOTROS.

El 10 de setiembre del año 1880, la Cámara de Diputados de la Nación, considera el proyecto de capitalIzación de la ciudad de Buenos Aires; el 20 de ese mismo mes hace lo propio el Senado.
Se promulga con el número 1.029 el 21 de setiembre.

Los seguidores de Carlos Tejedor, gobernador de la provincia de Buenos Aires, definido por el general Roca como "el apóstol del localismo porteño", denunciaron que dicha ley había sido impuesta por la fuerza de las armas.

En efecto, tras los combates entre el la Guardia Nacional convocada por el presidente Avellaneda (quien se había trasladado en junio de aquél año al barrio de Belgrano, junto a su gobierno a causa de la oposición porteña-bonaerense a la federalización de Buenos Aires) llevados a cabo en los Corrales, Barracas y Puente Alsina; los "localistas" debieron ceder derrotados a la designación de esa ciudad como la nueva Capital Federal.

El centralismo portuario con Roca adquirirá otra dimensión, "nacional", consensuada con el conjunto de las oligarquías regionales; `por ende mas abarcativo con respecto a quienes desde 1852, veían a la ciudad -puerto como independiente del resto del país (los denominados por estos "tejedoristas" como "trece ranchos").

Hoy por hoy, con un gobierno nacional en las antípodas del roquismo oligárquico y liberal, pro-británico; considero que se justificaría mucho mas ante un macrismo continuador de Carlos Tejedor, irrumpir con algo parecido a una Guardia Nacional y, a fuerza de leyes votadas en el Congreso custodiadas por dicha Guardia, volver a designar a Buenos Aires como Capital Federal de la República Argentina y terminar con el localismo porteño, liberal, oligárquico y pro-británico.

Porque si al Maurizio lo dejamos, en un par de años es capaz con la Metropolitana de expulsar de la Ciudad al gobierno nacional y obligarlo a mudarse fuera de los límites de la misma.

A veces hace falta tomar la Historia como ejemplo y obrar en consecuencia, tal como Roca y el entonces presidente Avellaneda hicieron con Tejedor.

Prof GB 

30 de MARZO de 1982.



Aquél día, los trabajadores se movilizaban a la Plaza de Mayo para enfrentar a la dictadura militar.
La marcha, prohibida, terminó luego de casi seis horas de luchas callejeras en todo el macro y microcentro con cientos de detenidos, heridos y la muerte de un trabajador.

Meses antes, en el barrio de Liniers, una misa realizada en San Cayetano para exigir PAN y TRABAJO, terminaba con una feroz represión y enferntamiento de miles de trabajadores encolumnados en la CGT conducida por SAúl Ubaldini.

En febrero del año 1977, Oscar Smith, Secretario General de Luz y Fuerza, desaparecía en manos de una patota de la ESMA, por defender mediante una huelga sel Convenio Colectivo de Trabajo de su gremio.

El 27 de abril del año 1979, la denominada Comisión de los 25 realiza el primer paro general contra la dicadura de Videla a quien el diario Clarín titula como "Presidente" con una foto que ocupa mas de la mitad de la tapa.
La dirigencia sindical entre los que se encontraba Saúl Ubaldini es detenida y enviada a la cárcel de Caseros.

Apenas un esbozo de la larga lucha de la clase trabajdora contra los genocidas de entonces.
Desaparecidos, encarcelados, exilados, despedidos durante años, de todos modso supiero con dignidad resistir y vencer con el conjunto del Pueblo a la tiranía militar.

El 30 de Marzo, fue el comienzo del fin de los dictadores.
Faltaría mucho aún para comenzar a marginar a sus cómplices civiles, muchos hoy disfrazados de demócratas.

GB

miércoles, 28 de marzo de 2012

MEDIOS, DELITO Y MANIPULACION


Medios, delitos y manipulación

Es necesario brindarle al usuario información contextualizada, no mosaicos de realidades partidas, mucho menos profecías apocalípticas que esconden finalidades políticas. Si usted se levantó temprano y entre las 7:30 y las 8 de la mañana encendió el televisor, usted, decía, no tuvo más opción que ser víctima de la angustia dirigida, del miedo como intento de disciplina social. 
Por Víctor Ego Ducrot (*) |

No importan los esfuerzos que se hagan en materia de prevención y lucha contra el delito desde distintos ámbitos del aparato estatal: esta semana, por ejemplo, cobró fuerza la actividad de la comisión del Senado de la provincia de Buenos Aires, dedicada a investigar el denominado “caso Candela” como punta de iceberg para desnudar la trama de complicidades entre crimen organizado, policías, funcionarios y políticos. Tampoco ciertas voces de alerta respecto de los peligros de la manipulación mediática con fines políticos y de control social.

No, no importan. Si ayer martes 27 de marzo, por ejemplo, usted se levantó temprano y entre las 7:30 y las 8 de la mañana encendió el televisor para más o menos enterarse de cómo venía la mano con el tiempo, o tomar nota de algunos aspectos que hacen a la información general; usted, decía, no tuvo más opción que ser víctima de la angustia dirigida, del miedo como intento de disciplina social: en ese horario todos los canales de noticias se dedicaban a robos, asaltos, homicidios; desbordaban de sangre derramada, describían un escenario que, sin desconocer la existencia de hechos criminales y su gravedad para el conjunto de la sociedad, no condice con el mucho más variado y complejo que ofrece la realidad real del país, no la realidad creada por los medios de comunicación dominantes.

¿Acaso reclamo que la prensa silencie los hechos delictivos? ¿O espero que los medios de prensa no impongan sus líneas editoriales a la hora de construir esos relatos? De ninguna manera; en el primer caso porque pretendería ciertos recortes a la libertad de prensa, en este caso a la agenda privilegiada por cada quien en el universo periodístico, algo que repudiamos todos quienes bregamos contra los oligopolios de la comunicación; y en el segundo porque propondría un imposible, acusando severo desconocimiento de la historia misma de la actividad informativa, esa que nos dice que la misma nunca es neutral, que siempre contiene y expresa una carga ideológica.

Sí, en cambio, me atrevo a recordar algunos epicentros teóricos y metodológicos para la práctica de este oficio, tópicos de insistencia en universidades y centros de capacitación profesional y de cacareo jamás cumplido en los manuales de estilo de los medios hegemónicos. Me refiero, por ejemplo, al de la necesidad de brindarle al usuario información contextualizada, no mosaicos de realidades partidas, mucho menos profecías apocalípticas que esconden finalidades políticas.

No me propongo aquí agotar una casuística que sostenga a pie juntillas lo enunciado en los párrafos anteriores, ni mucho menos desmerecer la importancia y los impactos negativos del problema; entre ellos ciertos datos políticos, como el alto índice de insatisfacción popular que provocan los episodios delictivos según muchas encuestas. Pero sí acercar algunas referencias invisibilizadas, silenciadas desde la páginas y las pantallas de la prensa dominante.

Un informe del fin de semana pasado de la Red de Observatorios Universitarios de Medios <www.redobservatorios.org.ar> se refiere al caso Baby Etchecopar como nudo testigo de lo que el juez de la Corte Suprema, Eugenio Raúl Zaffaroni, denomina criminología mediática.
“Ahí están otra vez. Esconden la nave en algún rincón oscuro del Conurbano (Bonaerense) y salen de nuevo, armados, dispuestos a todo. A matar o morir.” ¿Quién es el pregonero del terror? La maquinaria de la criminología mediática aceita sus engranajes y comienza a rodar; no estamos seguros, dicen, ante un ‘ellos’ cuyos márgenes son cada vez más difusos (…). El asalto al conductor radial y televisivo predominó en la escena mediática. Su peculiaridad no radica únicamente en que la víctima es un destacado portavoz de las políticas de mano dura en materia de delitos; el aspecto más relevante lo constituye el hecho de haber encarnado como pocos esa síntesis de estereotipos cuyo objetivo último es instalar una sociedad de control frente a una población inerme. Así, el tratamiento de la noticia que los diarios Clarín y La Nación efectuaron en relación al tema, se centra en caracterizar a los asaltantes como aquellos potenciales asesinos, delincuentes reincidentes, menores y marginales que habitan en aquellas ‘escuelas del delito’ que son las villas y barriadas pobres. Son ‘ellos’, un otro diferente y peligroso, que no teme a matar ni perder la vida.”

El informe ofrece un detallado análisis de artículos informativos y de opinión y nos sugiere, con elementos probados, acerca de los mecanismos de propaganda empleados por esos medios, tendientes a la siguiente ecuación, descripta por el mismo texto de la Red: “más poder a la policía, más efectivos patrullando las calles, mejores dispositivos de control tecnológico y rigor en la aplicación de las penas son los reclamos que confirman lo que, al decir de Zaffaroni, ‘a mayor represión corresponde menor libertad y mayor seguridad’”.

La lógica de lo noticioso como vértigo y como mosaico (por fuera de toda contextualización) empleada por la corporación mediática, hizo que el caso Etchecopar fuese desplazado por la trágica irrupción de un hecho de filicidio, en un barrio exclusivo de la provincia de Buenos Aires, episodio que no debería inscribirse como específico de la mal denominada agenda de la “inseguridad”, pero que al aparato mediático le da lo mismo, porque le sirve para lo mismo: propagación de la angustia y del miedo con fines disciplinarios y en orden a sus propios intereses.

Los hechos divulgados hablan de un crimen grave que seguramente la justicia penalizará con un máximo rigor, pero llama la atención que, hasta el momento de escribir este texto, muy pocas fueran las voces que se animaron a ensayar una interpretación de los hechos desde un ángulo distinto al que, y como bloque de opinión, sataniza a la madre homicida.

En ese casi desierto sobresale la nota “La venganza más cruel”, de Roxana Kreimer, publicada en el último número del semanario Veintitrés. Esa licenciada en Filosofía y doctora en Ciencias Sociales de la UBA indica, insinúa, un abordaje que seguramente repugna al pensamiento y a la práctica mediática del sistema de poder. Ubica al caso del filicidio que conmueve a los argentinos en el contexto de una referencia histórico literaria, y nos propone pensar: “el célebre monólogo de Medea es uno de los más conmovedores que se hayan escrito para reflejar la condición subordinada de la mujer, su rol de ciudadana de segunda. Eurípides nos hace compadecer a Medea y no a Jasón, que queda como un emblema del orgullo masculino, con desmedidas ambiciones de poder. En el final de la tragedia, ella se eleva al cielo sobre ‘el magno carro del sol’, orgullosa de su despiadada crueldad. Ella luchó por el amor; él, por el poder, casándose con la hija de Creonte para convertirse en rey”.

Como escribí al principio de este texto. Nada importa a quienes conciben a la comunicación como un privilegio que sostiene privilegios; si hasta el delito y la muerte del otro les vienen muy bien.
(*) Periodista, escritor y docente universitario. (Nota aparecida hoy en Tiempo  Argentino)


GB

martes, 27 de marzo de 2012

MEGAFON O LA GUERRA

"Desde fines de 1955-les dije-, con un pueblo en derrota y su líder ausente, soy un desterrado corporal e intelectual.
Y añadí:
-En nuestra fauna sumergida existen hoy el Gobernante Depuesto, el Militar depuesto, el Cura depuesto, el Juez depuesto, el Profesor Depuesto y el Cirujano Depuesto. No quedó aquí ningún hijo de madre sin deponer.
-¿Y usted qué lugar ocupa en esta fauna?-me preguntó Megafón chisporroteante de malicia.
-Soy poeta depuesto-le confesé modestamente.
-¿Ha pasado usted a mejor vida?-rió él.
-Vea-le respondí-, las "deposiciones" de una contrarrevolución idiota no suelen ir mas allá del significado medicofísiológico que también lleva la palabra. Y sus muertos civiles gozamos de una salud excelente.
-Con algunas excepciones- me corrigió el Autodidacto súbitamente dolorido.
-¿Los ametrallados de José León Suárez?.
-Y el fusilamiento del General.
Entendí que la sombra de Juan José Valle acababa de nublar la frente de Megafón y humedecer los ojos verdelago de Patricia.
-Sí, ahí estuvo el General, treinta y seis horas antes de su fusilamiento-me dijo Megafón-.Ahí sentado en la silla que usted ocupa. Era una medianoche de junio, y el General se demoraba frente a su pocillo de café negro como resistiéndose a la oscuridad y al frío que lo esperaba afuera.
-O al repsentimiento de su muerte-añadió Patricia Bell en un conato de sollozo-.Desde hacía un mes usaba ropas ajenas y techos prestados. Frente al pelotón de fusilamiento devolvió el anillo de su boda terrestre.
La pareja entró aquí en un silencio que respeté y en el cual se recosntruían sin duda los últimos gestos del héroe fusilado.
-Usted aludió recién a las víctimas de José León Suárez- me dijo luego Megafón.-Hace tres días recorrí ese basural amontonado en al llanura de Buenos Aires, y le aseguro que la pampa lloraba.
-¿Lloraba?-inquirí yo en tono circunspecto.
-Lloraba-insistió él-, y no la inmundicia del basural sino el deshonor que le habían inferido los ametrallados inocentes y sus ametralladores anónimos. En cuanto a la ejecución de mi General, no me subleva tanto en sí misma: es un gaje posible de la acción, y el que se haya hecho en la Penitenciaría Nacional y bajo el techo del crimen. Si hay que fusilar a un soldado , ¡que sea en una casa de soldados! ¡Lo exigen el estilo y el honor!."

Fragmento del libro de Leopoldo Marechal, Megafón o la Guerra.

Prof GB

Mayor Benardo Alberte, Memoria Peronista IV


Carta de Bernardo Aberte a Videla antes del 24 de Marzo de 1976 cuando fue asesinado. 
Escrito por Pablo Crocchi
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Alberte: Ahí tomé definitiva conciencia que los Lanceros de Bengala y sus batallones cipayos estaban pasando a degüello a la India.
BERNARDO ALBERTE ¡PRESENTE!
 
Por Pablo Crocchi
 
El sábado 22 de marzo recibí este correo del compañero Bernardo Alberte, siempre atento y consecuente con todas las cuestiones que comprometen al interés del Pueblo.
 
Esta vez no era referente a la deuda externa ni al hambre de nuestros niños, sino a su padre -tal vez su mejor amigo-, y a la vivencia más trágica que le tocó vivir.., y que nos involucra a todos los compañeros y buenos soldados argentinos por igual: el alevoso homicidio del teniente coronel Bernardo Alberte, primera víctima del maldito Proceso liberal-genocida-vendepatria de Videla y Martínez de Hoz, asesinado en la madrugada del 24 de marzo del ’76 por infames cipayos uniformados que aún pululan impunes en algún lugar.
 
El destacado militar y compañero don Bernardo Alberte era un oficial distinguido por sus cualidades y aptitudes, que siendo capitán fue destinado a edecán presidencial del Presidente Juan Perón en los tiempos en que se produjo el bombardeo a Plaza de mayo y la contra-revolución fusiladora del '55. Es decir: le tocó bailar con la más gorda. Y vaya si bailó... y con que estilo, digno de Gardel, Evita y del mismo General.
 
Fue su Delegado personal en el Movimiento Nacional Peronista en momentos difíciles de la década del sesenta, gozando de plena confianza por ser un hombre incorruptible.
 
En el ’55 preso y luego dado de baja sin recibir ni una moneda del Estado, se las rebuscó de cien formas para alimentar y sostener a su familia.

Fue elemento decisivo de la Resistencia Peronista, asesorando, adoctrinando y enseñando formas eficaces de organización para la acción: su pequeña lavandería era visitada discretamente por los cumpas que mantenían viva la brasa con la que encenderían –años después- la hoguera que iluminó el sendero a toda nuestra América Latina en los ‘70.
 
Jamás recibió prebendas, becas públicas ni beneficios personales: su vida personal siempre estuvo dedicada al servicio de la Patria, como don Arturo Jauretche, Squerre, Phillipeaux, los nobles militantes de esa época y todo buen soldado de la escuela sanmartiniana de Güemes. Leopoldo Marechal lo inmortalizó sin mencionar su apellido en Megafón o la Guerra y muchos lo admiramos sin conocerlo.
 
Decía Perón: -los verdaderos soldados no suelen quedarse a mitad de camino, salvo que allí los encuentre la eternidad de la gloria..., y como no podía ser de otra forma ese fue el destino de don Bernardo.
 
Advertido del maniobraje liberal que reemplazó bajo presión al general Numa Laplane y sus colaboradores de la conducción del Ejército preludiando el Golpe, y de la artera estrategia de los servicios de inteligencia que allí comenzaron contratar delincuentes para combatir a una subversión ya derrotada, siendo tal vez el verdadero origen de la llamada AAA, según algunos los servicios de las tres fuerzas armadas que luego intensificarían su accionar, denunció públicamente estas maniobras intentando impedir el trágico desenlace del 24 de marzo, que tantos coloniales de izquierda y derecha coincidieron en alentar y luego aplaudieron miserablemente sin importarles la represión brutal que se desataba sobre el Pueblo... hasta que también los afectó a ellos.
 
Supe de algún oficial de granaderos que se mofó de la Presidente convencido de la necesidad de terminar con el desgobierno, es decir, un traidor; escuché de periferia erpiana que la caída del gobierno era el objetivo táctico porque al caer las caretas el pueblo se despabilaría adhiriendo a sus delirios de la lucha armada; supe de Calabró, sindicalista gobernador de Buenos Aires, que recibió al gobernador golpista con un ágape en la casa de gobierno de La Plata; también supe de gente que esa noche concurrió a la plazas principales de sus ciudades para protestar contra el anunciado golpe; a los meses escuché a Borges diciendo, después de almorzar con Videla: -“este es un gobierno de caballeros...

Ahí tomé definitiva conciencia que los Lanceros de Bengala y sus batallones cipayos estaban pasando a degüello a la India.
 
Sin embargo debía saberlo, mi padre me alertó el 24 de marzo: -Esto pinta muy feo, anoche asesinaron a un camarada, una leyenda viva del Movimiento Peronista, Alberte, el alma de la Resistencia... Siempre lo admiré: cuidáte...

Sus ojos estaban húmedos de emoción. Yo era muy joven, pero lo entendí, y al rato llorábamos abrazados como ese 1° de julio cuando despedimos al General. (Bernardo Alberte (h).

Fuente, Nac y Pop, red nacional y popular de noticias.

GB

PREGUNTAS


Con este texto de Ernesto Espeche, destacado columnista de AgePeBA y director adjunto de la Agencia Periodística de América del Sur (APAS), culminamos nuestra cobertura del 24 de marzo, con un homenaje a todas las víctimas de la dictadura cívico militar.
Por Ernesto Especche (*) / El genocidio argentino lesionó no solo a la generación militante de la década de 1970. También ensució y marcó para siempre la infancia de muchos y muchas que debieron, primero, preguntar; luego aceptar, y solo mucho más tarde reconstruir y buscar verdad y justicia para mantener su memoria y la de las nuevas generaciones.
Tenía poco más de dos años cuando irrumpió la dictadura cívico-militar-genocida. Mi hermano había cumplido apenas un año 20 días antes. Mi papá, Carlos, hacía meses que no venía por casa: su nombre integraba una larga lista de “subversivos” buscados por las fuerzas represivas.
Mi mamá, Mercedes –o Mecha, como le decían todos-, trabajaba en el hospital, atendía nuestras demandas y esperaba noticias de su compañero. Ambos eran médicos y militantes del Partido Revolucionario de los Trabajadores (PRT). Ambos componen la nómina de 30.000 detenidos desaparecidos. No volvimos a saber nada de ellos.
¿Dónde está mi papá? ¿Cuándo viene? Mis preguntas debieron representar un peso insoportable para mi mamá. Desde marzo no se sabía nada de Carlos. Solo llegaban versiones contradictorias que desalentaban cualquier esperanza y aumentaban la angustia que rodeaba el entorno familiar.
El 7 de junio un grupo de tareas entró en la humilde casa en que vivíamos y secuestraron a Mecha. Y golpearon a mi tío. Y se burlaron de mi abuela. Mi hermano y yo, envueltos entre mantas en una habitación del fondo, debimos sentir muy cerca los golpes a la puerta de entrada, los gritos, los llantos, el ruido de las llantas del Ford Falcon que se llevaba a mi mamá y el vacío que sobrevino desde entonces.
¿Dónde se fue mi mamá? ¿Cuándo viene? Son inexplicables los mecanismos a partir de los cuales los niños conviven con la desolación hasta naturalizarla. En algún punto, las respuestas imprecisas, imposibles, asumen la lógica coherente de un relato que termina por desgastar -hasta agotar- las preguntas más elementales.

El ingreso a la educación formal es el primer espacio de socialización sistémica extra familiar. A esas alturas, todavía bajo el régimen, ya no había espacio para preguntas; ese lugar fue ocupado por un vacío que no se podía enunciar. “De eso no se habla”, es decir que “eso” no está, no pasó, no existe; nadie habla de lo que no pasó, y si no pasó no existe.
Entrada la democracia yo estaba en el cuarto grado. Había vuelto la libertad y –con ella- la posibilidad de decir.
¿Qué decir? Veía por la tele la desesperación de unas mujeres con pañuelo que pedían “aparición con vida”, los rostros de funcionarios prometiendo justicia, los gestos inmutables de señores uniformados que hablaban de cosas que no entendía. Sentía que todo eso no tenía que ver con mi mundo. Mi universo se cerraba en mi abuela –con quien vivía y a quien ya llamábamos “mamá”-, los deberes de la escuela, los juegos con mi hermano, las visitas de mis primos y tíos y poco más.
“Mamá, me ayudás con la tarea”. Mi abuela lloraba de impotencia. Qué sabía ella de ejercicios combinados si era una tana que apenas terminó el “primero inferior”, si sólo vivía para criar a sus nietos, los hijos de su Mecha que nunca volvió. Seguía llorando. ¿Por qué llorás mamita? ¿Te sentís mal?
Por esos días mi familia decidió que era el momento de contarnos lo ocurrido. Fue una noche, en casa de una tía. “Sus padres están muertos, los mataron los militares… eran personas maravillosas, pueden estar orgullosos de ellos”. ¿Por qué los mataron?, pregunté con una frialdad fingida. “Porque ayudaban a los demás, porque querían un país mejor”. La “noticia” explicaba, en parte, ese sentimiento de rareza, de absurdo, de ajenidad que me acompañaba todos los días. Esa noche, mi hermano y yo no dormimos, tampoco hablamos del tema.
En la radio decían que mis papás y otros señores ponían bombas, que eran violentos. “¿Sos hijo de terroristas?”, “¡Sos un guacho!”, “¡Pobre!, no tenés papá ni mamá”, ¿Por qué le decís mamá a esa señora vieja que te trae a la escuela?”… No tenía herramientas para hacer frente a la mirada del mundo; al fin de cuentas, un pibe de 10 años se encuentra en inferioridad de condiciones si consideramos que el mito de los dos demonios ya se había extendido como relato del poder oficial. La impotencia, la culpa, la vergüenza y la timidez aparecen, entonces, como síntomas de esa desigualdad.
Ya en la secundaria, el estudio de la historia no contemplaba en sus contenidos el repaso por la historia reciente. Sin embargo, las miradas de los profesores, de mis amigos y de la chica que me gustaba delataban cierta complicidad teñida de compasión. La pena es incompatible con el amor. La victimización, más tarde pude entenderlo, fue parte de la demonización.
La conclusión de mis estudios secundarios y la elección de una carrera universitaria marcaron el final de la vida de mi abuela. Doña María había llegado tan lejos como sus fuerzas le permitieron. Antes de dejarnos, así cómo me pedía que me abrigue antes de salir o que no olvidara llevar mi documento, me imploró que no me “meta en política”. Hice esa promesa con la convicción de que no podría cumplirla. Ya tenía decidido –y ella lo percibía- ir en búsqueda de mi identidad. “No quiero que se repita la historia” dijo con una voz temblorosa, cargada de miedo, de terror. Después se murió.
Ir al encuentro de una historia, individual y colectiva, supone un quiebre que pone en riesgo la propia subjetividad. Se trata de cuestionar a fondo los mitos, relatos y valores que tenemos internalizados, que vivimos como naturales. Eran los años de la “pacificación nacional”, el “fin de la las ideologías”, “el perdón y el olvido”. La impunidad de los genocidas les permitía caminar entre nosotros, hacer declaraciones en los medios y refregarnos su versión de la historia.
La asunción de mi condición de “hijo” de desaparecidos fue el punto cero de mi búsqueda. Me entrevisté con sus compañeros, sus colegas y amigos. Me hablaron de sus gustos personales, sus preferencias musicales y sus convicciones políticas. Me entusiasmé, me sorprendí, me emocioné, me enamoré de su vocación revolucionaria.
“Soy hijo de Carlos y de Mecha, y de los 30.000 desaparecidos”, me sorprendí diciendo en una tarde de marzo. Así como las Madres de Plaza de Mayo socializaron su maternidad, los hijos socializamos nuestra condición. Ese paso crucial no es un reflejo mecánico ni supone la ausencia del vacío y la desolación como sentimientos primarios. Es, más bien, parte de un proceso político complejo y lleno de contradicciones que opera como contenedor de las individualidades y como impulsor de nuevos relatos que intervienen en la lucha simbólica por definir los márgenes de la memoria colectiva.
Entonces, la memoria de un pueblo sobre su pasado no puede ser penetrada sino a través de la constitución de identidades colectivas que son, a su vez, mucho más que la suma de las identidades personales.
Hoy tengo más años de los que tenían Carlos y Mecha cuando fueron secuestrados. Sus caras jóvenes, llenas de ilusión y compromiso se confunden con otras tantas entre las pancartas de una movilización. Mis hijos conocen la historia de sus abuelos y crecen en un país con memoria, verdad y justicia. Yo sigo en la búsqueda, ahora con la fortaleza que da el compromiso con la militancia política y con los ideales de aquella generación maravillosa. Y ese niño que fui vuelve todos los días para preguntar por sus padres.
¿Dónde se fue mi papá? ¿Dónde está mi mamá? ¿Cuándo vienen?
* El autor es periodista e investigador universitario, doctor en Comunicación Social de la UNLP, director de Radio Nacional Mendoza y Director Adjunto de APAS. Militante por los derechos humanos e hijo de desaparecidos. La foto muestra al autor de este texto junto a sus padres, Mercedes y Carlos, ambos desparecidos durante la dictadura.


Fuente, AgePeBa.


GB

Aniversario del golpe: por qué los radicales fueron expulsados de Plaza de Mayo

Por José Cornejo I El autor se pregunta porqué los radicales fueron la única fuerza política expulsada de Plaza de Mayo el pasado 24 de marzo.



El sábado 24 pasado, hubo dos marchas a Plaza de Mayo. Está la movilización oficial de los organismos de Derechos Humanos: Madres, Abuelas e H.I.J.O.S. Y como es usual desde 2003, los partidos de la izquierda trostkista organizan su marcha paralela.
Las atrocidades cometidas por la última dictadura (en el campo humanitario, económico, bélico) y el compromiso de los organismos  le han dado una formidable legitimidad a las banderas de los Derechos Humanos. Por eso, a pesar de haber transcurrido 36 años del golpe militar, Plaza de Mayo rebosa de asistentes.
Así las cosas, una fracción de la Unión Cívica Radical se decidió a participar de la movilización. Se trató de un sector de la Franja Morada, frente universitario de la UCR y “Los irromplibles”, un colectivo territorial con mucha presencia en Caballito. Mucha perplejidad causó entre los transeúntes que el radicalismo acompañara desde Plaza Congreso hasta la Plaza de Mayo al Partido Obrero y al Partido de los Trabajadores Socialistas. Lo único que estas fuerzas tiene en común es su oposición al kirchnerismo.
La paradoja se resolvió cuando un cordón del PTS enfrentó a la UCR. Si bien un hombre mayor del trostkismo fue lastimado por “batatas” radicales, la columna de la UCR fue obligada a retroceder y terminó abandonando la Plaza por Diagonal Sur sin haber entrado. La presidencia de Raúl Alfonsín asumió el primer gobierno democrático y llevó a las Juntas Militares, responsables máximos del genocidio, al banquillo, un hecho insólito en la historia latinoamericana. Además, era un día de repudio al autoritarismo. ¿Por qué entonces los radicales fueron expulsados?
Una respuesta puede encontrarse en los cánticos del PTS. Hacían mención a las “leyes de impunidad”: la Ley de Obediencia Debida (solo los superiores eran responsables) y la Ley de Punto Final (las denuncias tenían una fecha límite para ser presentadas). El gobierno alfonsinista finalizó su gestión en una profunda crisis económica y desatando un vendaval represivo que se daba de bruces con la consigna radical de que “con la democracia se come, se cura, se educa”. El regreso radical en el bienio 1999-2001 fue aún menos feliz. La crisis económica fue más aguda y la represión todavía más feroz. El mandato de Fernando De la Rúa utilizó el estado de sitio para dejar 38 muertos (http://www.agenciapacourondo.com.ar/secciones/ddhh/6116).
Uno de los objetivos de la conmemoración es consolidar, profundizar un gran frente social de repudio a la dictadura. Expulsar a la UCR, aún con todas sus complicidades no ayuda.  La izquierda trostkista se caracteriza por sus desmesuras, como cuando silenció los micrófonos de las Madres de Plaza de Mayo, el 24 de marzo de 2006 (http://www.rodolfowalsh.org/spip.php?article1823) para poder difundir sus consignas partidarias.
Aún así, los dirigentes de la UCR deberían hacer un profundo análisis de porqué no pueden participar de la movilización masiva del 24 de marzo. Quizás así pueda salir del ostracismo el partido centenario.

Agencia Paco Urondo.

GB

lunes, 26 de marzo de 2012

El Fuego que dura y perdura.

Parenti, sobre complicidad civil de la dictadura (II): "Actores civiles van a quedar involucrados"


Parenti, sobre complicidad civil de la dictadura (II): "Actores civiles van a quedar involucrados"

Jueves 12 de Enero de 2012 20:23 Escrito por Agencia Paco Urondo



Por E. De la Calle y A. Garelli I Segunda parte de la charla de LA PACO URONDO con Pablo Parenti, Coordinador de la Unidad Fiscal de Coordinación y Seguimiento de las Causas por violaciones a los Derechos Humanos cometidas durante el terrorismo de Estado. Mirá lo que dijo.

APU: Una discusión que se dio desde siempre pero que ahora volvió con algún tenor polémico mayor, es el tema de la complicidad civil. En ese sentido, ¿cuál es el nivel de avance?PP: Cuando el proceso de juzgamiento empieza, lo hace por lo más obvio, lo más grueso y evidente, entonces empieza por el centro clandestino, por la tortura, por el secuestro. Luego la mirada se empieza a afinar un poco más, porque empiezan a aparecer otras declaraciones, otras pruebas que antes no había, los testimonios se enriquecen. Por ejemplo, pensemos las declaraciones sobre los delitos sexuales, que si bien había noticias desde la CONADEP y el Juicio a las Juntas sobre delitos sexuales, la cantidad de testimonios que hay hoy es comparablemente mayor. También empiezan a ver declaraciones sobre el papel de la Justicia. Es decir, muchos familiares empiezan a denunciar qué les pasó cuando fueron a la justicia a decir que un familiar había sido secuestrado. Empezamos a revisar los expedientes judiciales de la época. Empieza a haber otro tipo de mirada que permite imputaciones respecto de otros actores que no son los prototípicos del momento inicial de la persecución penal.




Yo creo que no caben dudas que la dictadura argentina fue una dictadura cívico militar. Ahora, no toda la participación civil en una dictadura se transforma inmediatamente en imputación penal. Lo que tenemos que hacer nosotros, cuando queremos hacer una imputación penal es poder vincular la intervención de una persona, su participación en hechos concretos. Entonces me parece que hoy en día vamos en esa senda. Pero, algo que tiene que quedar claro es que no toda responsabilidad social se hace a través del derecho penal. Hay muchas personas que quizá participaron de la dictadura militar pero pueden haber participado en lugares donde no tenían un vinculo directo con la represión. Lo que quiero decir es que el derecho penal es parte de la manera de saldar cuentas con el pasado. En la actuación del derecho penal parte de los actores civiles van a quedar involucrados, sin dudas.


APU: ¿Ustedes tuvieron acceso, trabajaron en la causa de Papel Prensa?PP: No, la causa de Papel Prensa la tramitó fiscalía. Esta Unidad Fiscal no actúa sobre una causa si no lo que hace es vincularse con los fiscales.


APU: Por último, te pido un balance de los cuatro años de la Unidad, pero sobretodo haciendo referencia a lo que ha sido desde 2003 para acá una de las políticas más ambiciosas que ha tenido el Estado nacional desde el gobierno de Néstor Kirchner. PP: Creo que es muy importante la política de persecución acompañada por muchos otros actos que tiene que ver con la memoria, con que la sociedad conozca y discuta lo que pasó en Argentina.




Y a mi me parece que una cuestión muy importante y valiosa del proceso de juzgamiento en Argentina es que demuestra que los juicios se pueden hacer, sin crisis social, y que lejos de poner en juego la estabilidad democrática fortalece la democracia. Creo que el futuro de la Argentina y el futuro del sistema democrático no es igual luego de estos juicios. Los juicios tienen un efecto político, social y pedagógico enorme. Yo destacaría esto. Veo la cantidad de jóvenes que hoy van a los juicios, cómo esto aparece en documentales, en programas de televisión, y mucha gente joven y no tan joven yo creo que conoce recién ahora lo que fue el horror de la dictadura en la Argentina. Y sobretodo en muchas provincias. Pensemos, Argentina tuvo un juicio muy importante que fue el Juicio a las Juntas, un juicios conocido en el mundo y es un emblema. Pero para muchas provincias el juicio fue solo una noticia, no tuvo una carnadura social tan fuerte como la que tiene hoy un juicio. El primer juicio en Corrientes fue un juicio que conmovió a la sociedad.




El de San Juan, San Luis... Creo que tiene un efecto social muy importante, mucho más que la historia judicial. Y también es un mensaje a otros países que tuvieron historias parecidas y quizá todavía no pueden definir un camino de justicia. Creo que la experiencia argentina indica que estos juicios son posibles y que fortalecen el sistema democrático. Así es que en ese sentido creo que tenemos que tener una satisfacción de cómo Argentina pudo revertir la historia. Una historia que iba a terminar con impunidad y que la Argentina pudo revertir. Más allá de los juicios, de las personas que no podamos juzgar, los tribunales hoy están abiertos y se está juzgando, esto me parece muy importante.




GB

Maurizio y los ingleses.





Mauricio Macri, se reunió con William Hague, ex líder del Partido Conservador y actual canciller de esa fuerza política en Inglaterra
Más que como un jefe de gobierno porteño, el ingeniero Mauricio Macri fue recibido ayer por las autoridades británicas como un pre candidato presidencial por el que sentían curiosidad y sobre el que querían conocer sus intenciones. La vicecanciller británica Gilliam Merron no lo disimuló y fue directa cuando lo interrogó en su oficina del Foreign Office: "¿Se presentará en el 2011?". Macri prefirió no revelarlo.
En el primer día de una gira de 72 horas en Londres, el jefe de gobierno porteño admitió que esta visita oficial en Gran Bretaña busca "restablecer la relación con el Reino Unido", casi congelada desde la llegada de Cristina Kirchner al poder en la Casa Rosada y a los tropezones luego de que Argentina declaró el default de su deuda externa.
Macri afirmó que a partir de la implementación de políticas internacionales inadecuadas, Argentina "quedó al margen del mundo". Aunque "no va a ser fácil" que recupere la confiabilidad en el corto plazo, se mostró optimista en revertir la situación "si volvemos a ser coherentes: Argentina tiene mucho que ofrecer".
El jefe de gobierno analizó con la vicecanciller británica los efectos de la crisis internacional y las herramientas a aplicar por las grandes ciudades con autonomía para reducir el impacto que provoca la recesión global. Macri le explicó la posición argentina sobre Malvinas y los proyectos de Buenos Aires para el bicentenario de la Revolución de Mayo, adonde Gran Bretaña enviará una muestra cultural.
En una reunión con el gabinete de Boris Johnson, el excéntrico alcalde de Londres, se interiorizó sobre los proyectos urbanísticos que aplica su alcaldía, en un diálogo que había iniciado con Boris en el fórum de Davos. Los ministros de políticas, Anthony Browne, y de transporte, Kuleever Ranger, explicaron la infraestructura y el funcionamiento del subterráneo londinense, que, con 274 estaciones, transporta diariamente 3 millones de personas. El pase Oyster Card, un boleto único que permite a los usuarios desplazarse en todo transporte público en la capital británica, también fue analizado porque un sistema similar se reproducirá en Buenos Aires.
Participaron de la comitiva de Macri el ministro de desarrollo económico Francisco Cabrera, Marina Klemensiewics por la COPINE y los diputados nacionales Federico Pinedo y Julián Obiglio, junto a su asesor de relaciones internacionales Diego Guelar.

Prof GB

El golpe cívico....



Por Horacio Bustingorry I El historiador analiza el rol de diferentes empresas durante los años de Terror. El estado de las causas y su rol en la economía actual.
http://eldiablosellama.files.wordpress.com/2012/01/mercedesbenz_obrerosdesaparecidos.jpg?w=614
Desde hace algunos años no es extraño referirse al último gobierno de facto como una dictadura-cívico militar. El término se ha ido imponiendo en el lenguaje periodístico, en las instituciones escolares e incluso en el sentido común de la población. La consigna para la marcha del presente 24 de marzo será “los grupos económicos también fueron la dictadura”, frase que incluye a los empresarios en el sector civil compuesto también por jueces, sacerdotes, políticos y medios de comunicación.
Existen algunos casos emblemáticos de complicidad empresarial en la organización de la represión. El ingenio azucarero Ledesma de Jujuy proveyó de camiones al Ejército para el secuestro de sus trabajadores. A mediados de 1976 en la denominada noche del apagón, la empresa cortó el suministro de energía eléctrica para facilitar las operaciones y permitió que dentro de la empresa funcionase el escuadrón 20 de gendarmería, constituido en centro clandestino de detención.
En la represión de la Ford también fueron utilizados rodados provistos por la empresa. Los militares usaron camionetas F-100 en los operativos e instalaron un centro clandestino de detención en la fábrica donde personal de la empresa participó de los interrogatorios. En la Mercedes-Benz los trabajadores eran secuestrados con listas negras proporcionados por los directivos. Las dos automotrices tienen características similares: las victimas fueron trabajadores delegados de sección o integrantes de la comisión interna.
Las empresas Acindar y Siderca también instalaron centros clandestinos de detención en sus predios. La primera, ubicada en Villa Constitución y presidida por José Alfredo Martínez de Hoz impulsó la represión en 1975 con el objetivo de desmembrar la dirección de la UOM local. En la represión participaron distintas fuerzas de seguridad y sectores afines a José López Rega. La empresa facilitó su helipuerto a la Policía Federal y permitió que se instalase un cuartel en la fábrica donde funcionó un centro clandestino de detención.
En la puerta de Siderca, perteneciente al Grupo Techint,  se instaló personal del Ejército con un listado de obreros “indeseables” proporcionados por la empresa. Los detenidos fueron alojados en un centro clandestino en el Tiro Federal de Campana, contiguo a la fábrica, que se comunicaba con el predio por una puerta. El mismo modus operandi fue empleado en el astillero Astarsa. El 24 de marzo de 1976 fuerzas del Ejército acordonaron la entrada del predio con tanques de guerra, carros de asalto y helicópteros e identificaron con colaboración de la empresa a los trabajadores “rebeldes” para detenerlos y llevarlos a la comisaría 1ª de Tigre.
Las causas judiciales
En todos los casos mencionados existen causas por delitos de lesa humanidad. La Secretaría de Derechos Humanos de Nación intervino en algunos como querellante. En la causa Ledesma uno de los acusados es su titular Pedro Blaquier quien fue citado para prestar declaración indagatoria. Sin  embargo la citación fue desestimada por el juez subrogante Carlos Olivera Pastor.
Los casos de Ford y Mercedes Benz están en el juzgado federal de Daniel Rafecas de San Martín. La causa de Astarsa también se tramita en la misma jurisdicción. La Secretaría de Derechos Humanos se presentó como querellante en las dos automotrices y en el caso de Ford participó de un acto en el que se señalizó la fábrica como un lugar de secuestro de trabajadores. A su vez el fiscal Federico Delgado ha pedido la indagatoria para los directivos de la empresa.
La causa de Acindar fue impulsada por la Secretaría de Derechos Humanos en diciembre de 2010. Está en manos del juez federal de Norberto Oyarbide pero por ahora ha presentado pocos avances. Finalmente, en septiembre del año pasado un grupo denominado “Trabajadores y Delegados de los 70 por Juicio a los Responsables del golpe cívico-militar” presentaron en la justicia penal documentación que involucra al directorio de Mercedes Benz, Ford, Astarsa y Techint en el financiamiento de los servicios de Inteligencia del Ejército. Si tomamos la caracterización de Rodolfo Walsh en su carta a la junta, donde plantea que las peores violaciones a los Derechos Humanos fueron producto de la política económica de la dictadura, concluiremos que estas empresas favorecidas por aquel modelo violaron los Derechos Humanos por partida doble
Los Grupos económicos en la actualidad
El gran apoyo recibido por Cristina en las últimas elecciones debe mucho a la política económica implementada desde 2003. ¿Qué rol jugaron los grupos económicos analizados en relación al modelo? Salvo Astarsa que cerró en 1994, el resto sigue en funciones. En la actualidad Ledesma desarrolla actividades diversificadas orientadas al mercado interno como la producción de papel, azúcar y naranjas. Sin embargo, las pésimas condiciones laborales de sus trabajadores y el autoritarismo frente a la población circundante a sus predios la posicionan como una de las empresas más dañinas del país. Sirva como ejemplo el desalojo que impulsó en terrenos de su propiedad que dejaron un saldo de cuatro muertos.
El caso de Techint es más complejo. El grupo está acostumbrado a condicionar a gobiernos y querer digitar la política económica nacional. Los roces con las gestiones de Néstor y Cristina fueron una constante pese a compartir algunos lineamientos generales de la política industrial. Sin embargo, las empresas del grupo dinamizan el mercado interno proveyendo insumos para la industria (sobretodo la petrolera) y abasteciéndose de una red de proveedores nacionales (sobretodo PYMES) a los que transfiere tecnología, financiamiento y capacitación de recursos humanos.
Acindar es una empresa consustanciada con el crecimiento industrial del modelo kirchnerista. La empresa fabrica alambres, clavos, mallas y barras de acero además de cordones para hormigón postesado y acero para estructuras de hormigón armado, insumos básicos de la industria de la construcción, pilar del crecimiento económico de todo el ciclo kirchnerista. La empresa no pertenece más a la familia Acevedo y está en manos de Arcelor Mittal, el principal productor siderúrgico del mundo, conformado en su mayoría por capitales indios.
Las automotrices han sido centrales en el modelo económico kirchnerista. El año pasado hubo un récord en la producción de autos, superándose las ochocientos mil unidades. El aporte de Mercedes Benz ha sido ínfimo y el de Ford de un 14 % pero ambas expresan un sector considerado estratégico por el gobierno nacional. La inauguración con presencia de Cristina de la nueva planta de motores de Ford en Pacheco simboliza ese aspecto. El mismo gobierno que señala un centro clandestino de detención en la fábrica le reconoce su actividad presente y la apuesta al futuro.
La responsabilidad empresarial
Los grupos económicos fueron la dictadura como también lo fueron las Fuerzas Armadas. De la misma manera que el personal militar comprometido con la represión está siendo juzgado, los empresarios que fueron cómplices deberán pasar al banquillo de los acusados. Caiga quien caiga y sin importar si siguen ejerciendo funciones empresariales en la actualidad.
Sin embargo, como dice Walsh, la violación más profunda a los Derechos Humanos de la dictadura fue su política económica. Sin un Estado que discipline al capital las empresas nunca cumplirán la función social que le atribuye la filosofía peronista.  Por esa razón el gobierno, al igual que lo hizo con las Fuerzas Armadas, busca encuadrar a los empresarios para comprometerles en una política nacional. Sólo así los grupos económicos cumplirán un rol positivo para el conjunto de la población y no cometerán nunca más un genocidio social.

Agencia Paco Urondo.

GB

Imágenes tomados del libro "Decíamos ayer", de Eduardo Blaustein y Martín Zubieta. Primeras planas de los principales diarios entre 1975 y 1976.

Qué opinarán hoy los escribas del oligopolio sobre estos titulares por-videlistas.
Cómplices del genocidio desde sus tribunas de tintasangrederramada.

GB

Día del derecho a la información.Setiembre 28.

   "Quizá sea oportuno recordar que un mes y pico después de las bombas atómIcas que aniquilaron Hiroshima y Nagasaki, el diario The New York Times desmintió los rumores que estaban asustando al mundo.
   El 12 de setiembre de 1945, este diario publicó, en primera página, un artículo firmado por un redactor de temas científicos, William L. Laurence. El artículo salía al encuentro de las versiones alarmistas y aseguraba que no había ninguna radioactividad en esas ciudades arrasadas, y que tal radiactividad no era mas que una mentira de la propaganda japones.
   Gracias a esta revelación, Laurence ganó el premio Pulitzer.
   Tiempo después, se supo que él cobraba dos salarios mensuales: The New York le pagaba uno, y el otro corría por cuenta del presupuesto militar de los Estados Unidos."

Eduardo Galeano.

Prof GB

domingo, 25 de marzo de 2012

RODOLFO WALSH, MILITANTE DE LA VERDAD.

"Nace en Lamarque, próximo a Choele-Choel provincia de Río Negro, el 9 de enero de 1927. Su primario y secndario lo hace con monjas  y curas irlandeses. Periodista. A fines de 1956 empieza a investigar los fusilamientos de peronistas en los basurales de José León Suárez, provincia de Buenos Aires: de allí saldrásu libro "Operación Masacre". A mediados de 1959 se instala en Cuba ayudando a instalar la agencia de noticias "Prensa Latina", donde se desempeña como Jefe de Servicios Especiales en el Departamento de Iformaciones. Debido a sus conocimientos de criptografía logra descifrara códigos de transmición, y anticipar la invasión mercenaria a Bahía de los Cochinos, instrunmentada por la CIA y el gobierno de los EE.UU. En febrero de 1968 en Madrid, Perón le presenta a Raimundo Ongaro, secretario general de la CGT de los Argentinos y el 1ª de mayo del mismo año aparece, el luego mítico semanario de la CGT, que Walsh funda y dirige.

Para 1970 comienza a colaborar en las Fuerzas Armadas Peronistas (FAP), a partir de su estrecha relación con Raymundo Villaflor (uno de los protagonsitas de su libro "Quién mató a Rosendo?) y Enrique Ardeti. Allí desarrolla trabaj de inteligencia-junto a Horacio Verbitsky y Nora Wolfson- especialmente escucha de las frecuencias policiales. A partir de la crisis política de las FAP, se incorpora a otra organización de la Tendencia Revolucionaria del Peronismo: Montoneros, donde con el grado de oficial segundo y el alias de Esteban y/o Profesor Neurus crea y dirige con éxito un sector del Departamento de Informacioens e Inteligencia. En el mismo año junto a su amigo, el poeta "Paco" Urondo participa como fundador y redactor del diario "Noticias" que representa los puntos de vista de los Montoneros.

Una vez producido el golpe militar, en junio de 1976 crea la agencia de noticias "ANCLA" y en diciembre Cadena Informativa, donde denuncia en soledad con un grupo de compañeros, atrocidades y negociados de la dictadura militar.
El 24 de marzo de 1977 al cumplirse exactamente un año del golpe, hace conocer su famosa "Carta Abierta de un Escritor a la Junta Militar". Al día siguiente por la zona de Constitucióm, en Buenos Aires, un grupo de tareas de la ESMA trata de secuestrarlo; no se deja agarrar con vida y precipita su propia muerte al desenfundar un revólver de bajo calibre que guardaba consigo. Una ráfaga de FAL ( fusil automático liviano) prácticamente lo cortó en dos.
El tiro de gracia se lo diuo el comisario Ernesto Enrique Frimon "220" Webwe, integrante de la patota.
Su cadáver fue exhibido como trofeo en la ESMA. Su casa en San Vicente, provincia de Bueos Aires fue saqueada, y varios de sus escritos inéditos robados."

Roberto Baschetti, "La memoria de los de abajo."

viernes, 23 de marzo de 2012

EL PODER ECONOMICO Y SU GOLPE.

"A partir del golpe militar de 1976 se comienza a conformar un nuevo bloque de poder cosntituido por la fracción de la oligarquía que se había diversificado hacia la industria y una fracción del capital extranjero que había liderado el proceso de sustitución de importaciones. E prierm objetivo fundamental de la dictadura militar fue redefinir en forma irreversible las características sociales, económicas y políticas que le habían permitido a los sectores populares cuestionar el poder y comenzar a definir un proyecto revolucionario. El otro consistió en que , junto a la reimplantación de las condiciones de dominación social, debían eliminarse las pujas internas dentro de los sectores dominantes mediante  la articulación de un nuevo bloque de poder.
Desde esta perspectiva, ciertamente quedaba invalidada la estrategia de profundizar la industrialización sustitutiva, ya que dicho proceso no habría hecho mas que consolidar las condiciones ya presentes en los sectores populares  asi como sus alianzas con la pequeña y mediana burguesía nacional.

En este contexto y con estos objetivos, el régimen militar internalizaba la crisis capitalista mundial, mediante una política económica basada, por un lado, en la apertura del mercado interno a los bienes importados y a la libre movilidad de los capitales.
Desde el momento mismo del golpe se produjo una acentuada redistribución del ingreso en contra de los asalariados, que se mantuvo a lo largo de toda la dictadura y se llevó a cabo mediante la caída del salario real. el redimensionamiento del mercado de trabajo y el cambio sectorial de la ocupación, el deterioro de las condiciones laborales y la prolongación de la jornada de trabajo.

Para lograr imponer una reestructuración de estas características, que sin duda también incluyó al mundo cultural, se recurrió a dos elementos básicos: el primero de ellos  fue la definición de una nueva doctrina represiva, que estuvo destinada a lograr su "viabilidad" social y política, mientras que el segundo fue el masivo endeudamiento externo".

Eduardo Basualdo, economista en "El burgués Maldito" de María Seoane.

De golpes de ayer y destituyentes de hoy.

Ricardo Balbín, jefe radical a mediados de los setenta "denunciaba a la guerrilla inustrial", cuando los trabajadores realizaban huelgas por sus condiciones de trabajo y salarios.
Las empresas Ford Motor Argentina, Mercedes Benz, Loma Negra, Ingenio Ledesma, entre tantas otras a las que siempre les interesa el país, están hoy denunciadas hoy por complicidad directa en la entrega de listados de sus cuerpos de delegados a las fuerzas represivas para su secuestro y posterior desaparición.
Dirigentes gremiales como Casildo Herreras, textil, o José Rodríguez del SMATA, y otros tantos entregaban (mientras se borraban) mas compañeros a la hoguera dictatorial.

Los medidos de la época titulando que en el pais el día del golpe y los posteriores "reinaba calma".

La teoría de los dos demonios esbozada  por el alfoncinismo, y aceptada por el conjunto de las fuerzas políticas en 1984, definía al golpe del 24 de marzo como una respuesta al terrorismo que se había mágicamente ensañado con el país.

Periodistas como Magadalena Ruiz Guiñazú reuniéndose con el ministro de interior de Videla, general Albano Harguindeguy, en el año 1980, para hablar de ...política(?).
Ernesto Sábato y el Partido Comunista argentino diciendo a medios de prensa nacionales e internacionales que Videla era un "general democrático".

En 1930, 1955, y, entre 1966 y 1973, diferentes dictaduras militares gobernaron a laArgentina.
Cada golpe tuvo sus aliados internos y externos.
Fueron todos ellos cívico-militares.
En el último que nos ocupa, los EE.UU de norteamérica tuvieron clara incidencia ya que los proyectos neoliberales en el marco de la globalziaicón se instalaban en el mundo.
Argentina, era el último país democrática de suramérica en 1976; imperioso resultaba desmantelar la estructurta socio-económica que databa de la década del '40 de neto corte industrialista.

Parte de nuestra población, al igual que en los golpes anteriores avaló con diferentes fundamentos la represión y el genocidio de la Dictadura, como saí también su modelo económico neoliberal.
Las mayorías silenciosas resistieron como pudieron a la muerte, a la desocupación y al "algo habrán hecho" o " por algo será".

Longobardi, Julio Blank, Marcelo Moreno, Ricardo Kirchbaun, Leuco, Bonelli, Magdalena, Majul, el director de FIAT, Cristiano Ratazzi, Macri, Van der Kooy, Nelson Castro, Noble, Magnetto, la Sociedad Rural, y quienes de manera salvaje y permanente tiñen de negación absoluta las políticas del Estado nacional, sin saberlo ( o sí?) le hacen el juego a las fuerzas económicas y financieras que se llevaron al fondo del abismo a la Argentina una y otra vez.
Diarios como La Nación o Mariana Grondona partícipes necesarios e ideológicos de los golpes de estado como el del 24 de marzo; son concientes del daño que causan.
El golirismo de todos ellos y todas ellas, no es solamente antiperonista, no.
Es antipopular.
Destituyente.
Quien halagó a Videla y sus secuaces como los que mencionamos en esta lista sumamente incompleta ( faltan mas de un obispo), no debe, no puede ser un opositor permanente y continuo a todo aquello que provenga equivocado o no de un gobierno que hoy posee el 54% de los votos.
Si la democracia no es ésta.
Si el Pueblo ya no votó.
Por qué la embestida no declara que es para reimplantar el modeo neoliberal y ya?

De sinceridades se trata, si almorzaste con Harguindeguy, Magdalena, por ejemplo, recordalo, decilo, y aceptá que añorás el neoliberalismo de Tahtcher, Pinochet, Reagan y Massera.

La Historia no se repite, tampoco es cíclica, pero es binaria.
Ellos los saben;  Nosotros debemos fundamentar cada día porqué esat luca de clases es larga, popular y prolongada.
Para sumar y aislar al adversario que ayer estuvo señalando y aplaudiendo la matanza y la barbarie.
Y hoy pontifica civilizado nuestro "relato oficial".

Prof GB.

miércoles, 21 de marzo de 2012

Memoria Peronista III

Su labor social en la guardería de la villa, y el club de Madres le crearon lazos con la gente. 
Escrito por www.desaparecidos.org/
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Lucia Cullen, la esposa de Jose Luis Nell, el amor de Carlos Mugica. Luego de la muerte de Nell, Lucía perdió un embarazo de ocho meses.
LUCIA CULLEN, LA ESPOSA DE JOSE LUIS NELL, EL AMOR DE CARLOS MUGICA
                                           luciacullenenlavilla-3-1.jpg                      
Lucía venía de una familia muy cristiana. Su libro de cabecera era el evangelio y su utopía transformar el mundo en un lugar más justo.
 
-Por esto supongo que su relación con la asistencia social tenía que ver con su cristianismo. Además el cristianismo en ese momento tenía, por lo menos el difundido a nivel juventud, un profundo contenido social. Hablamos de la década del '70. Ella tuvo relación con la gran difusión en ese momento de los Sacerdotes para el Tercer Mundo.( Rafael Cullen, hermano de Lucía)
 
Lucía había empezado a estudiar veterinaria porque quería mucho a los animales.
 
Pero en un Campamento Solidario de Trabajo descubrió que su vocación era el Trabajo Social.
 
-con estos campamentos recorrió distintos lugares del país mientras convivía y trabajaba a la par de los sectores más excluidos. esto fue a fines de4 los '60. (Emma Almirón, amiga de Lucía)
 
Con los jóvenes que hacían estos campamentos conformaron un grupo de trabajo que empezó a reunirse en la Villa de Retiro.
 
Justamente allí, Lucía se vinculó a la labor del Padre Mugica, capellán del peronismo tercermundista (Rafael Cullen).
 
Este comenzó a trabajar duro para y con la gente de Retiro.
 
-Ella fue siempre muy voluntariosa, entusiasta por todo lo que hacía, siempre andaba apurada y de buen humor (Rafael Cullen).
 
Por su personalidad dinámica, casi hiperactiva, directa, franca y simpática, se había hecho muy querida por todos en la villa. Sus amigas empezaron a ser -las chicas de Retiro.
 
"Me acuerdo que se juntaba sólo con las jóvenes que pensaban igual que ella."(Emma Almirón)
 
Pero esta situación le trajo problemas con su familia, pues no todos entendían sus ideas.
 
Volviendo a su formación como Trabajadora Social, Lucía -no soportaba a los intelectuales que vivían de la abstracción mientras otros obreros tenían que trabajar mucho para mantener la Universidad y sin acceso a ella. (Emma Almirón)
 
-Sobre todo protestaba mucho contra el ambiente muy tradicional de la Facultad de Derecho. (Rafael Cullen) (En ese momento, trabajo Social se cursaba en esa Facultad).
 
Sin embargo reflexionaba que, además de su militancia en la Villa, -pues se había incorporado a la J.P. a través de Mugica- necesitaba ciertas herramientas y metodologías para trabajar que sólo podía adquirir en la Universidad.
 
-Por esta razón me pide que la acompañe a anotarse en la Facultad de derecho(Emma Almirón).
 
En esa época, Lucía -leía al Che, a Cortázar, Fannon, Neruda, mucha poesía española de García Lorca; no olvidemos que en esos años se dio el boom de la literatura latinoamericana. (Rafael Cullen).
 
Además, escuchaba mucho folklore, chamamé, Tarragó Ross (padre), Mercedes Sosa, Serrat...-y lo que le encantaba hacer cuando tenía tiempo era deporte. (Rafael Cullen)
 
Por otro lado también se incorporó a la Organización Montoneros. Pero sólo hasta el '72; en ese momento decide abrirse por disconformidad con quienes dirigían la Organización.
 
Recuerdo que hacía muchas críticas, por eso en el '73 ya no estaba vinculada a ninguna organización.
La crítica era hacía todos los que aparecían en la Villa, en nombre de una organización, a decir lo que había que hacer o simplemente a tratar de dirigir a la gente e inmiscuirse en el trabajo que ya estaba organizado desde hacía años. (Rafael Cullen)
 
Las elecciones presidenciales del '73 provocaron un corte muy grande en el país.
 
En ese momento ella empezó a militar más todavía en la Villa. Al mismo tiempo, la Villa se convirtió en una espacie de centro político.
 
-La primera visita que hace Cámpora como presidente es a esta villa. Hay una foto que salió en el Diario. Mayoría donde están Lucía, Mugica, Cámpora y Lastiri en el Centro Comunitario de la villa (Rafael Cullen).
 
Mientras estuvo en la Organización Montoneros, conoció a José Luis Nell , con quien se casó en la capilla de Retiro. El también se alejó de Montoneros en la misma época, y se incorporó a la J.P. Lealtad.
 
-Lucía nunca dejó de ir a Retiro (Rafael Cullen).
 
Su constante labor social, que incluía trabajos en la guardería de la villa, en la proveduría, en el club de Madres y en un dispensario de atención médica, le habían creado estrechos lazos con la gente.
 
-Recuerdo una anécdota que recuerda su sensibilidad y su interés especial por el bienestar de los niños. Un día llegó a la casa de una familia donde se había muerto la señora y los chicos quedaban solos, y la veo a Lucía llorando en la puerta. Después se hizo una misa por la señora. Carlos Mugica allí comparó el llanto de Lucía con el de Jesús, en la parte de la muerte de Lázaro. Aquella reflexión nos ayudó mucho, y Lucía encontró una explicación, de esta manera, en el Evangelio. (Rafael Cullen)
 
Lucía coordinaba actividades en las distintas instituciones y -siempre andaba con su Ami 8 todo desvencijado buscando ropa en la casa de nuestros parientes y además artículos de venta barata, pues tenía la preocupación de no regalar nada, sino que sea un asunto de participación. (Rafael Cullen)
 
-Su Trabajo Social no estaba disociado de su visión política. El trabajo en ese momento estaba continuamente influido por lo político. Hoy, la política pasa por lo institucional, la Facultad, por ejemplo. Ella no militó en la Facultad, optó por militar con la gente del barrio, de la villa, gente con problemas concretos para enfrentar. (Rafael Cullen)
 
Pero le tocaron vivir días muy duros.
 
En el tiroteo de Ezeiza del 20 de junio, en el momento de la vuelta de Perón, su esposo fue herido de un tiro en la cabeza y quedó paralítico.
 
Así vivió durante un año y cuatro meses. Lucía nunca se separó de él, aunque no pudo ir a la villa durante mucho tiempo.
 
Nell decidió suicidarse en septiembre de 1974, -lo cual conversó con Lucía hasta que la convenció que era lo mejor para todos; convenció, incluso, a su psicóloga.(Emma Almirón)
 
Luego de la muerte de Nell, Lucía perdió un embarazo de ocho meses. Paralelamente, retomó su actividad en la villa.
 
En ese momento, decide estudiar psicología. -Le había pedido a su hermana un libro que se llama Psicología de la Muerte.  Esto se relaciona con la muerte de su esposo, de Mugica, y de otros tantos compañeros que desaparecieron en esa época.
 
-Ella fue avisada de que su vida corría peligro y le ofrecieron distintos lugares donde ir. Un amigo le ofreció ir a Francia, sin embargo eligió quedarse. (Emma Almirón)
 
-En el tiroteo de Ezeiza (un 20 de junio), en el que Nell quedó paralítico, murió un Capitán del Ejército. Entonces, a ella la secuestran, justamente, un 22 de junio, en 1976. Eligieron esa fecha como venganza por ese capitán. (Rafael Cullen)
 
-Luego, una de mis hermanas, mi mamá y yo nos vinculamos con el CELS (Centro de Estudios Legales y Sociales) y con las Madres; pero después, mi mamá se alejó. Se hicieron todas las cuestiones judiciales, pero no se pudo averiguar nada.
 
-Cuando desapareció, ya se había recibido de Trabajadora Social, pero todavía no tenía el título por los trámites burocráticos. El título se lo dieron a mi madre, en el año 1984. (Rafael Cullen)
 
Y hoy, seguimos recordando a la compañera Lucía Cullen en homenaje a todos los Trabajadores Sociales que creyeron y lucharon por un país más justo.

Prof. GB

Memoria Peronista II

colocaron el sable y el Winchester 44.40 en la Escuela de Ingenieros "General Juan José Valle" 
Escrito por Daniel Brion ( IMEPU ) - Hugo Pressman
general-juan-jose-valle-2-1.jpg
El Ejército realizo una entronización del busto del Gral Valle asesinado por la dictadura en junio de 1956 en Campo de Mayo, Pcia Bs As el 12 de Abril de 2007.
GENERAL JUAN JOSE VALLE
15 DE MARZO DE 1904 - 15 DE MARZO DE 2009
NACE EL
  GENERAL JUAN JOSÉ VALLE
Asesinado por la dictadura en junio de 1956

El presidente duerme
Por Hugo Presman
  9 de junio de 2006
 
El general Aramburu duerme. Ha desbaratado una sublevación que reivindicaba al régimen depuesto como califican los diarios.
Querían la vuelta del tirano prófugo eufemismo descalificatorio con el que se mencionaba sin nombrarlo al General Juan Domingo Perón.
 
Es el 12 de junio de 1956

La Penitenciaría de las Heras parece un escenario que remeda los campos de Navarro, ciento veintiocho años antes.

El General Juan José Valle espera ser fusilado como Dorrego [1].

Se había entregado para parar la matanza de sus seguidores y le habían prometido cuidar su vida.
 
El General Aramburu duerme. Desconoce que está por convertirse en Lavalle.
 
No sabe que esos disparos que terminarán con Valle, tendrán un replay catorce años más tarde, que concluirán con su vida, posiblemente en una estancia de Timote. Sueña con el poder que hoy tiene.
 
Otro hombre, sin interés por la política y mucho por el ajedrez, no sabe que estos hechos que están por suceder, lo arrancarán del anonimato. Es Rodolfo Walsh.
 
La historia entreteje su trama. Descarnada y sangrienta.
 
El General Juan José Valle empieza a escribir su carta de despedida.
 
Su verdugo, el General Pedro Eugenio Aramburu duerme.
 
El General Juan José Valle recuerda que con su verdugo entraron juntos al Colegio Militar. Fueron compañeros de banco hasta el grado de subteniente.
 
Sus familias veraneaban juntas en Mar del Plata. Incluso fueron socios, con otros generales, en una empresa de construcción.
 
Pero ahora todo esto no cuenta.
 
"Los democráticos" darán una lección de dureza. De eso saben mucho. Hace menos de un año han bombardeado a la población indefensa en Plaza de Mayo.
 
"Se acabó la leche de la clemencia" dirá después el dirigente "socialista" Américo(norteamericano) Ghioldi.
 
Faltan minutos para que la orden de fusilamiento se cumpla.
 
La proclama del levantamiento dice entre otras cosas: "Se vive en una cruda y despiadada tiranía "; se persigue, se encarcela, se confina, se excluye de la vida cívica a la fuerza mayoritaria; se incurre en "la monstruosidad totalitaria" del decreto 4161(que prohibía siquiera mencionar a Perón); se ha abolido la constitución para suprimir el artículo 40 que impedía "la entrega al capitalismo internacional de los servicios públicos y las riquezas naturales"; se pretende someter por el hambre a los obreros "a la voluntad del capitalismo" y "retrotraer el país al más crudo coloniaje, mediante la entrega al capitalismo internacional de los resortes fundamentales de su economía" [2].
 
El ensayista Horacio González sospecha que la redacción de la proclama pudo haberla escrito Leopoldo Marechal.
 
El General Valle sabe que está recorriendo los minutos finales de su vida.
Toma la estilográfica y le escribe a su ex amigo y hoy presidente:
 
"Dentro de pocas horas usted tendrá la satisfacción de haberme asesinado.
Debo a mi Patria la declaración fidedigna de los acontecimientos. Declaro que un grupo de marinos y de militares, movidos por ustedes mismos, son los únicos responsables de lo acaecido.
 
Para liquidar opositores les pareció digno inducirnos al levantamiento y sacrificarnos luego fríamente. Nos faltó astucia o perversidad para adivinar la treta.
 
Así se explica que nos esperaran en los cuarteles, apuntándonos con las ametralladoras, que avanzaran los tanques de ustedes aun antes de estallar el movimiento, que capitanearan tropas de represión algunos oficiales comprometidos en nuestra revolución. Con fusilarme a mí bastaba. Pero no, han querido ustedes, escarmentar al pueblo, cobrarse la impopularidad confesada por el mismo Rojas, vengarse de los sabotajes, cubrir el fracaso de las investigaciones, desvirtuadas al día siguiente en solicitadas de los diarios y desahogar una vez más su odio al pueblo. De aquí esta inconcebible y monstruosa ola de asesinatos.
 
Entre mi suerte y la de ustedes me quedo con la mía. Mi esposa y mi hija, a través de sus lágrimas verán en mí un idealista sacrificado por la causa del pueblo. Las mujeres de ustedes, hasta ellas, verán asomárseles por los ojos sus almas de asesinos. Y si les sonríen y los besan será para disimular el terror que les causan. Aunque vivan cien años sus victimas les seguirán a cualquier rincón del mundo donde pretendan esconderse. Vivirán ustedes, sus mujeres y sus hijos, bajo el terror constante de ser asesinados.
 
Porque ningún derecho, ni natural ni divino, justificará jamás tantas ejecuciones.
 
La palabra "monstruos" brota incontenida de cada argentino a cada paso que da.
 
Conservo toda mi serenidad ante la muerte. Nuestro fracaso material es un gran triunfo moral. Nuestro levantamiento es una expresión más de la indignación incontenible de la inmensa mayoría del pueblo argentino esclavizado. Dirán de nuestro movimiento que era totalitario o comunista y que programábamos matanzas en masa. Mienten. Nuestra proclama radial comenzó por exigir respeto a las Instituciones y templos y personas. En las guarniciones tomadas no sacrificamos un solo hombre de ustedes. Y hubiéramos procedido con todo rigor contra quien atentara contra la vida de Rojas, de Bengoa, de quien fuera. Porque no tenemos alma de verdugos. Sólo buscábamos la justicia y la libertad del 95% de los argentinos, amordazados, sin prensa, sin partido político, sin garantías constitucionales, sin derecho obrero, sin nada.
 
No defendemos la causa de ningún hombre ni de ningún partido.
 
Es asombroso que ustedes, los más beneficiados por el régimen depuesto, y sus más fervorosos aduladores, hagan gala ahora de una crueldad como no hay memoria. Nosotros defendemos al pueblo, al que ustedes le están imponiendo el libertinaje de una minoría oligárquica, en pugna con la verdadera libertad de la mayoría, y un liberalismo rancio y laico en contra de las tradiciones de nuestro país.
 
Todo el mundo sabe que la crueldad en los castigos la dicta el odio, sólo el odio de clases o el miedo. Como tienen ustedes los días contados, para librarse del propio terror, siembran terror.
 
Pero inútilmente. Por este método sólo han logrado hacerse aborrecer aquí y en el extranjero. Pero no taparán con mentiras la dramática realidad argentina por más que tengan toda la prensa del país alineada al servicio de ustedes.
 
Como cristiano me presento ante Dios que murió ajusticiado, perdonando a mis asesinos, y como argentino, derramo mi sangre por la causa del pueblo humilde, por la justicia y la libertad de todos no sólo de minorías privilegiadas.
 
Espero que el pueblo conocerá un día esta carta y la proclama revolucionaria en las que quedan nuestros ideales en forma intergiversable.
 
Así nadie podrá ser embaucado por el cúmulo de mentiras contradictorias y ridículas con que el gobierno trata de cohonestar esta ola de matanzas y lavarse las manos sucias es sangre. Ruego a Dios que mi sangre sirva para unir a los argentinos. Viva la patria."
                                                                                          
Juan José Valle
Buenos Aires, 12 de junio
 
9 de junio de 1956
 
El alzamiento había sido infiltrado por el gobierno que conocía todos los movimientos. Podría haberlo abortado, pero decidió que emergiera para reprimirlo con fiereza. Aún lamentaban no haber bombardeado la cañonera paraguaya en que se había refugiado Perón en septiembre del año anterior.
 
Juan José Valle y Raúl Tanco habían pasado a la clandestinidad hacía meses.
 
El movimiento cívico militar se había empezado a planear en el barco-cárcel Washington.
 
El inicio de las acciones sería la lectura de la proclama revolucionaria a las 23 del sábado 9 de junio, cuando en el Luna Park peleaban el zurdo noqueador Eduardo Lausse con el chileno Loayza. Un grupo de civiles se reunían en Lanús, con el pretexto de la pelea, para escuchar la proclama.
 
El gobierno ya tenía redactado los decretos por los que proclamaba la ley marcial y la de la lista de fusilados cuyos nombres no consignaba.
 
Los focos del alzamiento fueron Campo de Mayo, La Plata y La Pampa. Todos los levantamientos ocurrieron entre las 22 y las 24 horas.
 
El gobierno estableció la ley marcial a las 0,32 del 10 de junio. El decreto fue firmado por el Presidente y Vicepresidente, Pedro Eugenio Aramburu y Isaac Francisco Rojas respectivamente, y por los ministros de Ejército Arturo Ossorio Arana, de Marina Teodoro Hartung, de Aeronáutica Julio Cesar Krause y de Justicia Laureano Landaburu.
 
Dice María Seoane en Clarín del 4 de junio de 2006: -Para aplicar la ley marcial a los sublevados esta debía ser aplicado con retroactividad al delito cometido, violando el principio de irretroactividad de la ley penal.Pocas horas después, firman el decreto 10363 que ordena fusilar a quienes violan la Ley Marcial .
 
Los civiles reunidos en Lanús, fueron llevados a los basurales de José León Suárez y fusilados. Varios sortearon los disparos y huyeron. El testimonio de uno de ellos, Juan Carlos Livraga, sería el inicio del libro de Rodolfo Walsh, Operación Masacre, que inauguraría el género de no ficción y cambiaría para siempre la vida del autor de Esa mujer. Dice el notable escritor:
 
-La primera noticia sobre los fusilamientos clandestinos de junio de 1956 me llegó en forma casual, a fines de ese año, en un café de La Plata donde se jugaba al ajedrez, se hablaba más de Keres o Nimzovitch que de Aramburu y Rojas, y la única maniobra militar que gozaba de algún renombre era ataque a la bayoneta de Schlechter en la apertura siciliana. En ese mismo lugar, seis meses antes, nos había sorprendido una medianoche el cercano tiroteo con que empezó el asalto al comando de la segunda división y al departamento de policía, en la fracasada revolución de Valle.
 
Tampoco olvido que, pegado a la persiana, oí morir un conscripto en la calle y ese hombre no dijo: Viva la Patria sino que dijo: No me dejen sólo, hijos de puta.
 
Seis meses más tarde, una noche asfixiante de verano, frente a un vaso de cerveza, un hombre me dice:
 
Hay un fusilado que vive.
 
No se qué es lo que consigue atraerme en esa historia difusa, lejana, erizada de improbabilidades. No sé por qué pido hablar con ese hombre, por qué estoy hablando con Juan Carlos Livraga.
 
Pero después sé. Miro esa cara, el agujero en la mejilla, el agujero más grande en la garganta, la boca quebrada y los ojos opacos donde se ha quedado flotando una sombra de muerte. Me siento insultado, como cuando oí aquel grito desgarrador detrás de la persiana.
 
Livraga me cuenta su historia increíble; le creo en el acto".
 
Las muertes llevan a Valle a entregarse para parar la matanza con la promesa que le formulan de respetar la vida de los sobrevivientes y la suya propia.
 
El presidente duerme
Cuenta Roberto Bardini en una nota publicada en Argenpress:
 
"En junio de 1956, Susana (Valle) es una adolescente de 17 años. Esa noche, le permiten ver a su padre durante unos instantes en el patio gris de la Penitenciaría Nacional.
Mientras ella llora, lo ve llegar erguido, entero, sonriente, rodeado de un grupo de Infantería de Marina que lleva puesto cascos de acero y porta ametralladoras. Los soldados parecen más asustados que el oficial que va a morir en veinte minutos más. Las autoridades los dejan conversar en una sala fría, custodiados por los infantes armados. El general se sienta en una silla y ella se coloca en sus rodillas. En un cuarto contiguo, un enfermero militar tiene preparados dos chalecos de fuerza por si el padre y la hija sufren un choque emocional. Ellos no dan muestras de ningún quebranto, pero algunos de los jóvenes custodios están a punto de desmayarse y otros deben ser retirados de la sala, víctimas de crisis nerviosas.
Valle le explica a Susana por qué decidió no asilarse en una embajada y entregarse: "¿Como podría mirar con honor a la cara de las esposas y madres de mis soldados asesinados? Yo no soy un revolucionario de café".
Antes de enfrentar el pelotón, el oficial tiene varios gestos. Renuncia al ejército, pide ser fusilado de civil y rechaza al confesor que le han asignado, Iñaki de Aspiazu, por ser capellán militar. En su lugar, solicita la presencia de monseñor Devoto, el popular obispo de Goya. Cuando Devoto llega, comienza a sollozar emocionado. Valle bromea:
¡Ustedes son todos unos macaneadores! ¿No están proclamando que la otra vida es mejor?
Y a su hija, que tiene las mejillas llenas de lágrimas, le dice: -Si vas a llorar, andáte, porque esto no es tan grave como vos suponés: vos te vas a quedar en este mundo y yo no tengo más problemas"... ...Un oficial dijo -Ya es la hora-Valle se quitó el anillo que llevaba y lo colocó amorosamente en manos de la muchacha. También le entregó algunas cartas: una dirigida a Aramburu, otra para el pueblo argentino, y otra para abuela, mamá y para mí.
Le dio un abrazo, la besó y, aún más tranquilo que antes, se fue a paso firme por un largo pasillo después de hacer un despreocupado ademán de despedida.
 
Eran las 22 y 20 del 12 de junio de 1956.
En esos mismos momentos la esposa de Valle imploraba clemencia apelando al viejo amigo, ahora presidente. La respuesta fue:  El Presidente duerme 
Al día siguiente un lacónico comunicado oficial informó:
-Fue ejecutado el ex General Valle, cabecilla del movimiento terrorista sofocado
 
 
NOTAS:
 [1] "La suerte de Dorrego, prisionero de Lavalle, no se decidió oficialmente. Su ejecución fue obra del partido unitario reunido secretamente en una casa particular bajo la forma de un Consejo de los Diez:
Del Carril y Agüero instigaron epistolarmente al general vencedor para que ejecutara al gobernador", Vicente Fidel López "Historia Argentina"
[2] Rodolfo Walsh "Operación Masacre", página 65
 
Asesinados en Lanús, simulando fusilamiento, 10 de Junio de 1956
Tte. Coronel José Albino Yrigoyen,
Capitán Jorge Miguel Costales,
Dante Hipólito Lugo,
Clemente Braulio Ros,
Norberto Ros y
Osvaldo Alberto Albedro.
 
Asesinados en los basurales de José León Suárez, disparando por la espalda, 10 de junio de 1956
Carlos Lizaso,
Nicolás Carranza,
Francisco Garibotti,
Vicente Rodríguez,
Mario Brión.
 
Muertos por la represión en La Plata, 10 de junio de 1956
Carlos Irigoyen,
Ramón R. Videla,
Rolando Zanetta.
 
Fusilados en La Plata, 11 y 12 de junio de 1956
Teniente Coronel Oscar Lorenzo Cogorno,
Subteniente de Reserva Alberto Abadie.
 
Fusilados en Campo de Mayo, 11 de junio de 1956
Coronel Eduardo Alcibíades Cortines,
Capitán Néstor Dardo Cano,
Coronel Ricardo Salomón Ibazeta,
Capitán Eloy Luis Caro,
Teniente Primero Jorge Leopoldo Noriega,
Teniente Primero Maestro de Banda de la Escuela de Suboficiales Néstor Marcelo Videla.
 
Asesinados en la Escuela de Mecánica del Ejército, 11 de junio de 1956
Sub Oficial Principal Ernesto Gareca,
Sub Oficial Principal Miguel Ángel Paolini,
Cabo Músico José Miguel Rodríguez,
Sargento Hugo Eladio Quiroga.
 
Ametrallado en el Automóvil Club Argentino, 11 de junio de 1956
Miguel Ángel Maurino
(falleció el 13 de junio de 1956 en el Hospital Fernández)
 
Fusilados en la Penitenciaria Nacional de la Av.Heras, el 11 de junio de 1956
Sargento ayudante Isauro Costa,
Sargento carpintero Luis Pugnetti,
Sargento músico Luciano Isaías Rojas.
 
Fusilado en la Penitenciaria Nacional de la Av.Las Heras, el 12 de junio de 1956
Gral. De División Juan José Valle.

Asesinado, simulando suicidio por ahorcamiento, en la Divisional de Lanús
el 28 de junio de 1956, donde estuvo detenido desde el 9 de junio de 1956
Aldo Emil Jofré.
Prof. GB