Buenas, ¿Cómo estás?
Voy a arrancar esta segunda entrega de Nos fuimos mundial, luego del mail de presentación, con dos datitos muy simples, que no te van a ocupar mucha memoria y con los que podés quedar como un rey o reina en el próximo asado, cuando toda la mesa esté hablando del torneo que ya está por empezar.
Va el primero: la superficie de Catar es de 11.571 kilómetros cuadrados, es decir la mitad (sí, la mitad) que la provincia de Tucumán. Parece irrisorio, pero es así, y te voy a decir algo más que te va a dejar pensando y que retomaremos próximamente: nunca antes, en toda la historia de la humanidad, un país tan diminuto tuvo tanto poder.
Ahora vayamos con el segundo dato, pero antes es necesario que veas cómo es la bandera catarí. Son dos mitades, una blanca y otra granate, y esas dos mitades están separadas por una línea hecha de nueve bordes dentados. ¿Sabés por qué son nueve? Porque cada borde representa a un emirato de los que, a principios del siglo XX, firmaron un tratado de protección con Gran Bretaña, que era el amo colonial. Siete de ellos, con el tiempo, se unieron en una sola nación y hoy forman, justamente, los Emiratos Árabes Unidos. El otro es un país independiente, una islita todavía más pequeña que Catar llamada Bahréin. Y el noveno, por supuesto, ya sabés cuál es. |
No hay comentarios:
Publicar un comentario