Pegale al chancho para que aparezca el dueño, dice el refran popular, usado por Cristina en alguna oportunidad. También alertó hace unos años que si algo le pasara miraran hacia el Norte, ¿mar del Norte?
La tapadera
Para realizar operaciones encubiertas pero legales, la CIA utiliza varias estructuras asociadas.
Una de las mas potentes es la NED (National Endowment for Democracy)
La NED fue presentada en sociedad por Ronald Reagan en 1982 en el Parlamento Británico y creada en 1983.
La NED no sólo opera en sintonía con la CIA sino con el MI6 Británico.
La NED y sus tentáculos son herramientas del pacto militar anglosajón que vincula a Londres, Washington y Camberra, pacto en el que se incluye igualmente la red de espionaje Echelon. Además de la CIA, el MI6 británico y el ASIS australiano también pueden utilizar los servicios de la NED.
Para invisibilizar esta relación entre los servicios el Reino Unido instituyó la Westminster Foundation for Democracy (WFD).
La WFD se estableció según el modelo de la NED: su administración está en manos de los partidos políticos (8 delegados: 3 del Partido Conservador, 3 del Partido Laborista, uno del Partido Liberal y el octavo para los demás partidos representados en el parlamento británico).
La NED tiene a su vez varios brazos legales bajo el formato de Fundaciones que “ayudan” o financian movimientos “democráticos” a lo largo y ancho del mundo, entendiéndose por democráticos a los favorables a las minorías que gobiernan al planeta desde USA y Gran Bretaña.
Financian partidos, sindicatos, y otras ONGs y tienen redes de influencia y cientos de millones de dólares para comprar voluntades.
Cómo la NED nació para dar la estocada final al bloque comunista, recurrieron hábilmente a ejecutivos de procedencia ideológica consistente con ese fin principal.
Los tres presidentes que tuvo la NED han sido Allen Weinstein. John Richardson y Carl Gershman, los tres trostkistas pertenecientes al partido Social Democrats USA y a la Freedom House.
Mientras el presidente de la Corporación Cambiemos no hace otra cosa que ceder todo el terreno ganado en décadas en el terreno de las reivindicaciones pacíficas de soberanía sobre Malvinas, la presidenta Cristina es atacada por todos los medios posibles, incluída ahora la agresión física directa a cargo de una patota del British Working Party ( Partido Obrero y sus franquicias ) televisada en vivo por el multimedio Clarín que de casualidad andaba por esas latitudes.
Lo miremos como lo miremos una vez más los intereses británicos cuentan con la guardia pretoriana de los troskish vernáculos y la maquinaria demoledora de la hegemonía mediática.
Ya había sucedido cuando la 125, momento en el que no sólo la oligarquía local sino las grandes cerealeras multinacionales (británicas las mas de ellas) se pusieron contra el gobierno de Cristina.
La Sociedad Rural, que encabezó la huelga de productores agrícolas en 2008 tenía el propósito de derrocar al gobierno de Cristina Fernández, y no ha sido nada más que un instrumento del imperio británico durante toda su existencia. ¿De que lado estaban los troskish?
Dónde se satisface una necesidad popular ahí están los troskistas para complicarla, han favorecido abiertamente el voto en blanco en las elecciones presidenciales del 2015, argumentando que Scioli y Macri eran lo mismo, equivalente a decir que no hay diferencias entre el leberwurst y el salchichón primavera. Mismo temperamento siguieron con la elección en CABA que de haberse resuelto con la derrota del macrismo hubiera complicado las chances presidenciales de Macri.
Cada acción del troskismo, incluído este ataque a la Presidenta Cristina, está en sintonía con los intereses del Imperio y la Corona Británica y contra los intereses genuinos de la Argentina.
Y cómo para muestra basta un botón reproducimos los dichos de Altamira acerca de Malvinas en la página web del Partido Obrero el 12 de Abril de 2012. Si esto no es doble discurso, ¿el doble discurso dónde está?
Es decir que el tema de Malvinas, que la burguesía argentina dice que quiere recuperar, se está transformando y se va a ir transformando en un tema de desintegración nacional, en un tema de desintegración del Estado argentino, en un tema de desintegración de la burguesía argentina.
Sería esclarecedor que el compañero Altamira presentara el balance de ingresos – egresos de su partido y sucursales, muy especialmente en el rubro libras esterlinas.
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