Mauricio Macri pasó ayer por Mendoza y posó para los flashes junto a Julio Cobos. La foto buscó resaltar la unidad del Frente Cambiemos, que integran el PRO, el radicalismo y la Coalición Cívica. Esa pretendida cohesión se vio resquebrajada luego de las elecciones porteñas, en donde compitieron Horacio Rodríguez Larreta, del partido amarillo, y Martín Lousteau, con el apoyo de la UCR y la CC. Y se notará en las PASO: no habrá búnker común entre los precandidatos para aguardar los resultados de las elecciones. Sí, en cambio, una foto compartida.
Pocos apostaban a la supervivencia de Cambiemos cuando Elisa Carrió y Mauricio Macri dieron en los primeros días de febrero el puntapié inicial de la alianza que, según parece, será el principal rival del Frente Para la Victoria para las presidenciales. Un mes y medio más tarde Ernesto Sanz impuso su voluntad en la UCR y el radicalismo se sumó al espacio. Uno de los más fervientes opositores a la postura del titular del centenario partido fue Cobos, quien pretendía sumar al massismo a la entente. Aspirante a una de las senadurías mendocinas, el otrora vicepresidente viajó ayer hasta Las Heras para participar de una actividad con el alcalde capitalino. "En la vida nada se construye solos, se necesita tener equipo", aseguró Macri en un guiño a los boinas blancas. Acto seguido, confraternizó con su colega y señaló que los ingenieros son "mejores que los abogados".
Macri ingresó a un café local cuando desde los parlantes sonaba el tema de Pappo "Juntos a la par" y saludó al gobernador electo, Alfredo Cornejo, y a la primera postulante a diputada nacional Susana Balbo, del PRO. En la provincia cuyana el macrismo apoyó la candidatura de Cornejo, al igual que Sergio Massa. En las PASO locales, ni el ex alcalde tigrense ni quien fuera presidente de Boca pudieron viajar hasta Mendoza, pero Macri sí estuvo en el festejo por la victoria en las generales.
Si bien fueron escasísimas las actividades conjuntas, el trío presidenciable se verá las caras mañana en el Museo de Arte Decorativo, ubicado en la zona más exclusiva de Buenos Aires y sonreirán para los fotógrafos. "Están en óptima relación, hablan todos los días", le dijo a Tiempo un asesor de la Coalición Cívica. "Hubo un montón de actos que no fueron públicos", agregó sobre el vínculo que liga a Sanz, Carrió y Macri. Hasta ahora la presentación de un libro del senador fue la actividad más destacada que compartieron.
En las PASO, cada uno de las cabezas de lista presidencial esperará los resultados por separado, pero se descuenta que los perdedores se acercarán hasta el comando de campaña ganador para saludar al hombre que representará a Cambiemos en las generales del 25 de octubre próximo. "Hasta el 9 de agosto vamos a estar compitiendo", prometieron en la UCR. "Y al día siguiente vamos a laburar para el ganador", completaron.
Las elecciones porteñas habían hecho tambalear a Cambiemos. Primero, por la hostilidad entre Lousteau y Larreta en los días finales de la campaña; después, por el giro discursivo de Macri, con guiños a las políticas kirchneristas. La apuesta, ahora, parece ser bajar las diferencias. Y mostrarse juntos. «