Entrevista a Raquel Robles, directora de revista “La Granada” que lleva tres números dedicado a los distintos relatos sociales, en el marco de esta publicación nos comenta los rasgos esenciales y “aventuras” de la edición independiente de revistas.
Por Maricruz Gareca y Boris Katunaric
APU: En primer lugar, nos gustaría que nos cuentes que salió primero en formato digital y este año publicó sus dos primeros números en papel.
Raquel Robles: Esta revista empezó en junio de 2013 en formato digital con bastante éxito, tuvo muy buena recepción en la gente pero, si bien es un formato que está muy bien y que tiene una llegada impresionante, también hay un montón de gente que no, no sé si no accede, pero no gusta de leer textos en la web, gente que nos interesa un montón, inclusive gente que escribía en la revista pero que, por su misma formación o la costumbre, no la consumía. Entonces, decidimos lanzarnos a la aventura papel, y además porque nos gusta el objeto, tocar el papel, quedártelo y leerlo en distintos lugares, aunque ahora se puede leer también en el subte en formato digital. Allá fuimos, entonces, en una aventura muy arriesgada porque económicamente es fuerte el impacto, no tenemos pauta, no porque no queramos, sino porque no tenemos, así que es un emprendimiento que va a ser una inversión.
Pero bueno, el objeto salió buenísimo. El número dos, honestamente, está más lindo que el uno, y también hicimos un reajuste en cuanto a la distribución que aprendimos con el primer número que distribuimos en la Ciudad de Buenos Aires y en el conurbano, y nosotros sacamos una tirada que después hace difícil de encontrar, porque para que esté en toda la Capital está medio ( ) por los kioscos, ¿no?
APU: En relación a eso, justamente, nos interesaba preguntarte cuáles son los problemas que atraviesan las revistas culturales independientes, las más chicas, a la hora de entrar en el mercado de los kioscos.
RR: Es muy duro porque las mismas reglas que hay para la revista Gente hay para vos que tenes una tirada de 1.500 números y la distribuidora es una intermediaria entre vos y los camiones; la distribuidora se queda con un porcentaje altísimo y al menos yo no veo que haga demasiado, te informa poco porque no te dice en qué que kioscos estás y no podes decir a tus lectores: “mira, anda al kiosco de Corrientes y Montevideo que está ahí”. Ellos te dicen una zona en la que la distribuyen. Además, no lo podes hacer vos mismo porque hay todo un sistema, no podes ir a los kioscos y decir: hola, cómo estás, querés mi revista, o lo podes hacer como hizo Sudestada, con mucha paciencia, ellos lo hacen a mochila, pero ya llevan diez años de laburo.
APU: Es un sistema que funciona de una manera muy limitada.
RR: Y sí, primero, es un laburo enorme y segundo, tampoco es que aunque vos te quieras cargar con ese laburo, el medio te recibe. Lo que funciona con un monopolio funciona de la misma manera en cualquier lado y también los kioscos se van endeudando y, entonces, los grandes medios dicen: bueno, si queres que te soporte la deuda que tenes, vende esto y no vendas lo otro. La verdad es que es un mercado complicado, muy cruel, pero aun así nos animamos y ya este mes vamos a sacar el número tres y, como ya te decía, pudimos, con mucho esfuerzo, determinar que la distribuidora hiciera calle Corrientes, Rivadavia, microcentro y subte, nada más, para que la tirada esté más concentrada y la gente la pueda encontrar. Y para los que vivan en otro lado, se pueden suscribir y se la mandamos por correo.
Vamos a ver cómo nos va con este nuevo número y, además, estamos embarcados en otra aventura que es la edición de libros. En noviembre, con los amigos de Cienflores vamos a sacar nuestro primer libro que se llama 17 instantes de una primavera de Yulian Semiónov en aquella Unión Soviética y es un libro de espionaje sobre la Segunda Guerra Mundial; es un librazo que acá llegó poquito y estaba en las bibliotecas comunistas nada más y lo vamos a sacar ilustrado por un ilustrador que se llama Diego Tripodi y es un genio total. La verdad es que estamos muy entusiasmados con este libro, por el texto que es de espías y te lo comes en un minuto porque queres saber qué pasa y, además, es un escritor que escribe de manera increíble.
APU: La granada, título que surge de una obra de teatro de Rodolfo Walsh, es antes que nada una revista de relatos sociales. Nos interesa, entonces, que nos cuentes un poco sobre esta decisión de apostar a este tipo de relatos.
RR: Es una revista de relatos sociales, exactamente. Nosotros entendemos que lo social, la realidad, está compuesto por muchas narrativas y entonces intentamos —a veces nos sale divino y a veces, no tanto, pero lo intentamos— que lo que contamos de la realidad esté contado con las reglas de la narrativa, por eso lo trajimos a Rodolfo como padrino porque es el que mejor, creo yo, hizo esto de contar con elementos de la ficción la realidad. La realidad, la denuncia, no tienen por qué ser un plomazo cuando la lees.
Intentamos convocar escritores para escribir notas de las que no hay muchos periodistas, y hacer de cada una de las historias un cuento, y cuando hablamos de cuento no es porque sea mentira, sino porque la verdad puede ser contada de manera que sea lindo de leer. Así que nuestra búsqueda es también por la literatura, por cruzar estos dos campos —la literatura y lo social— y hacer algo para que vos te enteres de cosas y, al mismo tiempo, puedas disfrutar de eso que estás leyendo.
Para leer más: http://revistalagranada.com.ar/
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